Abrazad al candidato Moreno

Juan Manuel Moreno, que el sábado se convertirá en presidente del PP-A, se convirtió este viernes en protagonista del acto en el Parlamento. Sólo Susana Díaz eludió hacerse una foto con él.

el 28 feb 2014 / 21:39 h.

15542062Juan Manuel Moreno Bonilla, que este sábado será designado presidente de los populares andaluces, abrazó el viernes al vicepresidente de la Junta Diego Valderas con el mismo afecto que a su predecesor en el PP-A, Juan Ignacio Zoido, a su mentor Javier Arenas, a Dolores López Gabarro, a la que ha elegido para que sea su número dos, y a varios miembros del Gobierno andaluz. Hay muchas fotos de estos momentos, porque este viernes quien quería salir en la foto, durante el izado de la bandera andaluza ante el Parlamento, sólo tenía que arrimarse al flamante candidato del PP a las autonómicas. Pero no hay foto de Moreno con su gran rival, la presidenta Susana Díaz, porque el protocolo les separaba 50 metros durante el himno andaluz, y luego ella se esfumó en una carrera fugaz hacia el interior de la Cámara. Ya no hubo otra oportunidad. «¿Se han saludado?», le preguntaba, curioso y en voz baja, un miembro del Ejecutivo a un grupo de periodistas. «Yo no lo he visto». Sus señorías, arreglados como para una boda de postín, entraron atropellados en el salón plenario, y hasta después del discurso del presidente no se resolvió el misterio. Fue el propio Moreno Bonilla, en medio de un avispero de cámaras y micrófonos, quien contó lo ocurrido con una sonrisa irónica en el rostro: «No, no he tenido oportunidad. La presidenta ha entrado de manera muy rápida en la Cámara. Espero coincidir con ella en los próximos días». Moreno no es diputado autonómico, no tiene espacio en el Parlamento, el viernes entró como invitado, porque hasta la semana que viene ostenta el cargo de secretario de Estado de Sanidad, pero el poco tiempo que estuvo aprovechó para repetir el mismo mensaje que la semana pasada se le escuchó a Alberto Núñez Feijóo, y que tantas ampollas ha levantado entre los socialistas. «En Andalucía no se consolidará el Estatuto de Autonomía hasta que ese produzca la alternancia política», dijo. El joven político recordó que esta comunidad es la única de España donde sólo ha gobernado un partido, siempre el mismo, que es como decir que el PP siempre ha perdido las elecciones, y cuando las ganó (en marzo de 2012), no contó con mayoría suficiente para gobernar. Moreno repitió aquello tan áspero para Susana Díaz de que hasta que «el PP no tenga una oportunidad de gobernar, no se habrá culminado la Transición», y luego habló un rato de la nueva ejecutiva que está formando, «como prometí, llena de mujeres». La diputada Dolores López Gabarro, que será la nueva secretaria general del PP-A, y la delegada del Gobierno en Andalucía, Carmen Crespo, fueron sus cicerones en el Parlamento. El que posiblemente será el tercer contrincante en las autonómicas, Antonio Maíllo, coordinador regional de IU, apostó por no acudir al acto del 28-F en el Parlamento, y esperó en la calle a unirse a la masiva manifestación que había convocado su grupo. También se comentó bastante la ausencia del expresidente José Antonio Griñán. Fue el único, porque sus tres predecesores –Rafael Escuredo, José Rodríguez de la Borbolla y Manuel Chaves– estuvieron presentes en la izada de bandera y en el discurso de Gracia. Todo transcurrió encorsetado en el protocolo habitual, aunque en un momento éste fue desbaratado por el consejero de Economía, José Sánchez Maldonado, que pensó que el discurso en el pleno era antes que la izada de bandera, y llegó tarde abriéndose paso a empujones para unirse a sus compañeros de gabinete.

  • 1