Local

Ensayo para la vuelta al cole real

El primer día, entre el horario de adaptación y la emoción del reencuentro, ningún niño se resiste. Mañana será otro día

el 10 sep 2013 / 14:54 h.

TAGS:

Colegio-El-Carmen-Tomares Un ensayo general. Es lo que se vivió ayer en las casas de los 210.307 alumnos sevillanos que iniciaban el curso escolar 2013-2014 y en los 533 colegios que abrieron sus puertas. Si alguien temía los atascos de tráfico y el griterío de niños en masa desde temprano en las calles, se sentiría aliviado porque desde que se impuso eso de los horarios de adaptación y las entradas escalonadas, la vuelta al cole ya no es lo que era. La verdadera prueba de fuego será hoy, cuando la mayoría de los centros funcionen ya en horario completo. Y no se hagan ilusiones si ayer a sus hijos no hubo que despertarlos y acudieron al colegio felices y contentos por el reencuentro con sus amigos. Pasada la emoción del primer día, volverán los remoloneos para levantarse y los tirones por el camino para no llegar tarde. Sofía, que empieza segundo de Infantil, estaba tan nerviosa por ir ayer al centro Ángel Ganivet de Sevilla Este que el día anterior no dudó en llamar a su madre, a la que le tocaba hacer guardia en el Hospital de Valme, para recordarle que el martes empezaba el colegio. Ayer madrugó más que su hermano Nacho, que va a cuarto de Primaria, y sabe por experiencia que quedan por delante nueve meses de madrugones. En Triana, Paula iba saltando y cantando de camino al colegio San Jacinto. Su curso, segundo de Primaria, entraba a las 11.30 pero llevaba desde bien temprano diciéndole a su madre que iban a llegar tarde. En el patio la esperaban su amigas para fundirse en un abrazo, como el que se dieron Raquel, de 5 años , e Irene. La hermana mayor de Raquel ya había entrado y, según su padre, “esa sí que estaba histérica porque este año cambiaba de clase y no sabía si le tocaba con su mejor amiga, así que hasta que no hemos visto las listas no se ha quedado tranquila”. Sano recibimiento en el colegio José María del Campo. La seño de Educación Física, Paqui Martín, lleva también el programa de alimentación saludable y organiza actividades durante todo el año porque “cada vez hay más conciencia pero las familias hoy también tienen muchas prisas y se imponen los precocinados, así que en la escuela tenemos que hacer un poco porque no se pierda la dieta mediterránea”. Antiguos alumnos dieron la bienvenida a quienes aún estudian en el centro disfrazados de frutas y verduras y ofreciéndoles trozos de plátano, melón o manzana que durante la mañana preparó el Ampa. La escena se repitió en cada centro. Bullas de padres acompañando a sus retoños en el primer día, tan ansiosos de vivir –y fotografiar si es posible– el momento que en algunos colegios, como el Jardines del Valle del Centro, tuvieron que poner coto al acceso. Allí estudia segundo de Infantil Juan, que según su madre “no tiene muy claro qué es lo que pasa hoy, porque antes de venir ha estado viendo Mike el caballero tan tranquilo”. La camiseta verde del director contra los recortes y en defensa de la escuela pública recordaba la espada de Damocles que se ciñe sobre la enseñanza. La normalidad del inicio de curso viene marcada, recuerda el responsable del sector en CCOO-A, José Blanco, “por los recortes que contribuirán a aumentar las desigualdades”. La plantilla de profesores se incrementa este año en 199 docentes en la provincia hasta alcanzar los 20.840 pero mientras el mantenimiento de la ratio ha hecho que en Primaria “se hayan cumplido los plazos en la cobertura de vacantes”, en ESO “el incremento de la plantilla sigue siendo insuficiente y habría que hacer más esfuerzo en Bachillerato y FPante el aumento de la demanda”. Tanto Blanco como el presidente de la Federación de Ampas, José Manuel Nieto, alertan del déficit de profesores para la enseñanza bilingüe. “Este año ha entrado en vigor la exigencia del nivel B2 y han tumbado a gente de la lista”, señala Blanco. Y ¿cuánto cuesta la vuelta al cole? Según las cuentas de los padres, unos 30 euros de material “de inicio, luego el goteo”;más de 100 en libros para Infantil (en Primaria y ESO son gratis) y unos 70-80 de uniforme (voluntario en los públicos). La Junta ha congelado los precios públicos del aula matinal, las extraescolares (15,5 euros al mes cada uno)y el comedor (4.5 euros diarios el menú), con bonificaciones según la renta (la mitad de los usuarios tiene derecho a la gratuidad). Con todo, baja la demanda, más ceñida a la necesidad. “No hay más remedio, trabajamos los dos”, dice el padre de Raquel y Clara. La madre de Paula tiene sus motivos:“En casa es una lucha así que si aquí come mejor, bien, que eso me dicen; y si no, ojos que no ven...”.

  • 1