El grupo aeronáutico castellanoleonés Aciturri , considerado uno de los proveedores principales de Airbus en España, hizo su desembarco en Andalucía en mayo de 2010 con la compra de la histórica Aeronáutica del Sur, Aerosur. Apenas nueve meses después de la integración, la firma sevillana ya le ha reportado una importante mejora de la cifra de negocios, que al cierre de 2010 se aproximó a los 100 millones de euros, frente a los 75 con los que cerró el ejercicio anterior.
"Teníamos que estar presentes en Andalucía porque tiene un sector aeronáutico con un desarrollo importante", indicó en una entrevista con este periódico el consejero delegado de Aciturri, Ginés Clemente Ortiz, quien enmarcó esa operación en la estrategia del grupo de "crecer sin perder eficiencia", tal y como les demanda el mercado.
Aerosur se ha convertido así en una pieza complementaria, tanto por ubicación geográfica como por actividad, pues viene a cubrir un déficit en el negocio de la compañía castellanoleonesa, aportando su conocimiento y experiencia de más de dos décadas en la integración de grandes conjuntos de aeroestructuras.
La inversión de Aciturri en la compra de Aerosur se situará en torno a los cinco millones de euros y, a día de hoy, ya es propietario del 60% de la firma sevillana, en virtud del acuerdo alcanzado con los anteriores dueños, por el que compartirán la propiedad durante siete años (a contar desde 2010), momento en el que completará el 100% de la titularidad. El primer paso fue una ampliación de capital por importe de 2,2 millones, cantidad que fue destinada a capitalizar la empresa, explicó, y por la que adquirió el 49% de la sociedad.
"Una de las claves es la talla de la empresa pero la otra es la eficiencia, por lo que tenemos en cuenta operaciones que nunca pongan en peligro esa capacidad", incidió. Y, aunque admitió que la compra de Aerosur "era una incógnita que tenía no pocos riesgos sobre el papel", finalmente se ha adaptado a la filosofía del grupo, con lo que se mostró muy satisfecho de cómo se ha producido la digestión de la compra.
Clemente Ortiz avanzó que en estos momentos Aciturri no tiene "ningún proyecto de compra a corto plazo" en Andalucía, si bien no cerró las puertas a las oportunidades que puedan surgir.
Precisamente, acerca de una eventual operación de alianza o fusión con las otras dos empresas de referencia a nivel de proveedores para el fabricante europeo Airbus en España, Aernnova y Alestis, el consejero delegado de Aciturri admitió que "quien conoce el sector opina que sería bueno", pero que al mismo tiempo, "nadie ha hablado con nosotros de fusiones ni de alianzas" más allá de los cauces habituales de colaboración entre empresas.
"Creo muy firmemente que las empresas tienen vida propia y en realizar aquellos planes que realmente tengan un interés económico e industrial tanto para las empresas como para el sector", aseveró.
De hecho, ese deseo expresado en voz alta por el constructor europeo Airbus, se enmarca en la tendencia general que rige esta industria y que, a juicio de Ginés Clemente, se orienta hacia la dirección de "fortalecer más que reducir a sus proveedores", de manera que éstos cuenten con mayor dimensión y fortaleza financiera para poder acompañarles en el desarrollo de los programas de los grandes constructores.
Tampoco desterró una eventual toma de participación industrial en la firma andaluza de referencia del sector, Alestis. "No tiene por qué ser ninguna locura", aunque no sea un planteamiento que se haya puesto sobre la mesa. Aun así, reiteró que "cualquier cosa que tenga sentido económico e industrial" no es descartable.
El grupo Aciturri, que suma una plantilla que ronda el millar de trabajadores, cuenta con plantas en Miranda de Ebro (Burgos), Madrid, Valladolid, Álava, así como en Sevilla y Cádiz, y su actividad se orienta desde la ingeniería y el diseño de productos hasta la fabricación de partes metálicas y de fibra de carbono, pasando por la integración.
Entre la carga de trabajo más relevante destaca su participación en el nuevo avión de medio alcance, el A350 de Airbus, del que se ha adjudicado el estabilizador vertical (VTP), así como una parte de la Sección 19. Tal es la importancia de este programa, que en su proceso de desarrollo Aciturri tiene prevista una inversión que rondará los 110 millones de euros.
"Las cajas deben seguir siendo un soporte para las empresas"
El grupo Aciturri -en el que la familia Clemente cuenta con el 51,24% del accionariado- tiene entre sus socios de referencia a dos cajas de ahorros, Caja Duero (15,85%) y Caja Burgos (12,81%), la primera en fase de noviazgo con la malagueña Unicaja y la segunda ya casada con la sevillana Cajasol y otras dos entidades en Banca Cívica.
En plena reestructuración del sector financiero, donde las cajas se transforman en bancos y su vinculación al territorio se circunscribe fundamentalmente a la Obra Social, el consejero delegado de la compañía aeronáutica, Ginés Clemente Ortiz, destacó que las cajas "han sido siempre un magnífico instrumento y soporte para hacernos crecer a muchos industriales y también para que crezca la economía".
Por esta razón, consideró que las cajas "tienen que seguir siendo ese soporte porque encarnan a las entidades financieras de mayor cercanía al cliente y al territorio y ése es un valor muy importante", reseñó.
Así, se mostró confiado en que las cajas que actualmente son accionistas "seguirán manteniendo el apoyo a la economía real y contarán con su acompañamiento", con lo que expresó no estar "nada preocupado" ante un posible viraje en sus participaciones industriales, pese a que hay que contar ahora con más agentes.
"Estoy convencido de que las entidades que resulten del proceso de concentración van a seguir apoyando a los proyectos reales que crean riqueza y van a estar tan cerca como lo han estado siempre, puesto que la base del negocio de las cajas está en su territorio".