Tras una semana de rumores, la constructora española ACS reconoció ayer ante la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) haber mantenido conversaciones con la eléctrica francesa EDF sobre el sector energético europeo y su interés por Iberdrola y el mercado español.
La constructora respondió al requerimiento de la CNMV tras las declaraciones realizadas por el presidente de Banca March (propietario del 22% de ACS a través de Corporación Financiera Alba), Carlos March, quien adelantó ayer que ACS había mantenido conversaciones con EDF y otras compañías con el fin de jugar un papel protagonista en una eventual reordenación del sector.
Durante la rueda de prensa de presentación de resultados de la entidad bancaria, Carlos March especificó que entre las otras compañías con las que ACS mantiene conversaciones "normales y abiertas" están Gas Natural, Repsol YPF y las alemanas E.ON y RWE. Tras estas declaraciones, Repsol YPF negó haber mantenido contactos con ACS ni con sus accionistas para tratar posibles operaciones corporativas en el sector.
Después del cierre de mercado, la constructora, que protagonizó la tercera mayor caída del Íbex 35 con una bajada del 7,09% hasta los 33,92 euros por acción, remitió un comunicado a la CNMV confirmando conversaciones con EDF. En su nota, ACS explica que en estos contactos, que califica de "normales entre operadores energéticos", no se ha concretado "ningún tipo de acuerdo", por lo que es un asunto que no se ha sometido al Consejo de Administración. ACS añade que su estrategia es "la consolidación de un gran grupo energético español" donde pueda ser protagonista "junto al resto de sus socios".
Por su parte, Corporación Financiera Alba puntualizó ayer por la tarde a la CNMV que "ni sus administradores ni sus representantes" han mantenido conversaciones sobre una posible operación sobre Iberdrola ni acerca de la reordenación del sector en España y, por tanto, no ha participado "en acuerdo alguno". Desde París, EDF reiteró que no hay nada decidido sobre Iberdrola.
Por otro lado, las cajas de Castilla y León, que cuentan con un 4,7% de Iberdrola, expresaron ayer su apoyo a la eléctrica ante una eventual opa de ACS y EDF y destacaron la españolidad de la eléctrica.
El presidente de Unión Fenosa, Pedro López Jiménez, señaló desde El Cairo que la eléctrica desempeñará "un papel importante" en el panorama energético independientemente de que ACS y EDF formulen una oferta por Iberdrola.
ACS tiene un 45% de Unión Fenosa, y un 7,7% de Iberdrola de forma directa y otro 5% mediante derivados financieros.
