El trofeo que acredita al Sevilla como vigente campeón de la Copa de la UEFA duerme ya en Manchester, ciudad que acogerá la nueva final. Ayer, una representación del club se lo entregó a Michel Platini en tierras británicas para que éste lo entregue, el próximo 14 de mayo, al nuevo campeón.
La comitiva nervionense estuvo formada por José María del Nido, presidente de la entidad, Pepe Castro, vicepresidente, y dos de los capitanes del plantel, Andrés Palop y Daniel Alves, quienes asistieron a la ceremonia de la entrega del trofeo celebrada en el ayuntamiento de Manchester.
Allí, el Sevilla entregó la copa a Michel Platini, presidente de la UEFA, y éste a su vez se la dio a Glynn Evans, alcalde de la ciudad, para que la custodie hasta la final.
En el acto también estuvo el embajador de la final de la Copa de la UEFA, Denis Law, goleador en la década de los 60 y 70 del Manchester United, entre otros equipos, así como Mike Kane, uno de los representantes de la corporación municipal, encargado de dar a conocer los actos que la ciudad pondrá en marcha para que los aficionados británicos puedan contemplar el trofeo.
Tras la ceremonia, en la que no pudo estar como inicialmente estaba previsto Enzo Maresca debido a las molestias que sufrió en los oidos durante el viaje en avión a Valencia, José María del Nido hablaba de sus sensaciones al entregar el trofeo que tantas alegrías ha dado al Sevilla y su afición.
"Este año no hemos podido decir, como el año pasado junto con Maresca, que la devolvemos con la intención de recuperarla, pero por una buena razón: que hemos disputado la Champions. El Sevilla ha sido la atracción de la gala", dijo en la radio del club.
"Da pena devolverla, y más nosotros que la hemos tenido dos temporadas, lo que es algo atípico o inusual, pero no podemos olvidar que sólo devuelven las copas los que han sido capaces de ganarlas", añadía el presidente, que aprovechó la ocasión para hablar con Platini de "las claves de este Sevilla que ha llegado a estos niveles en Europa"
Por su parte, Palop, el gran protagonista de la última edición del torneo por su gol en Donetsk y su actuación en la tanda de penaltis de Glasgow, reconocía haber tenido "una despedida particular con la copa", a la que agradeció "lo mucho que nos ha dado, pero ahora tenemos que pensar en la Liga de Campeones".
"Ha sido un acto muy bonito y emocionante. Me ha recordado lo que disfrutó la afición en la final y hemos visto un resumen con los mejores momentos de la UEFA, todo muy enfocado al Sevilla, que se nota cómo está creciendo, porque hemos estado rodeados de muchas personalidades del fútbol", agregaba el portero, apuntando que prefiere "dejar la UEFA así, como campeón, que en un terreno de juego".
Ahora, Palop se centra en el compromiso de este próximo fin de semana contra el Atlético de Madrid en el Sánchez Pizjuán. "El cuarto puesto va a estar muy peleado, porque el Villarreal está un poco lejos. El sábado tenemos una gran final con un rival directo. Será un partido de cuatro puntos", comenta el portero valenciano del Sevilla, sabedor de que la trasdencia que el resultado del choque puede tener en la lucha por el cuarto puesto de la clasificación. Sólo dos puntos separan en estos momentos al equipo nervionense del madrileño.
