El puente proyectado por el Ayuntamiento tiene cuatro carriles para el tráfico rodado.
El proyecto del nuevo puente en la Cartuja, junto al complejo de la torre Pelli, está centrando el debate urbanístico en la ciudad por los impulsos y retrocesos del Gobierno de Juan Ignacio Zoido. Hay que recordar que aprobó este viernes la adenda al convenio de 2005 con Puerto Triana para cambiar de pasarela peatonal a puente para tráfico rodado y usar los 4,8 millones que ya pagó Puerto Triana para la reurbanización y que, por otro lado, desvió los 185.000 euros presupuestados para la redacción del anteproyecto a otras obras. Y es que la intención municipal es levantarlo en 2017 o 2018, pero hay muchos inconvenientes a superar. El mayor es el rechazo de la Junta, que tiene que aprobar el cambio del PGOU y, entre otros, la posible afección al pabellón de la Navegación. Así lo advierte Agesa, la sociedad de la Junta que gestiona los activos de la Expo 92, en sus alegaciones.
Unas alegaciones que han sido rechazadas por el Gobierno local que, además, no comunicó a Agesa el cambio del convenio con Puerto Triana para la reurbanización de la zona y la inclusión del puente para tráfico rodado en el documento de 2005, pese a ser una de las partes firmantes. Así lo advirtió el secretario de la Gerencia de Urbanismo, que puso pegas a la adenda. Un último informe municipal justificó la exclusión de Agesa y, finalmente, la modificación se aprobó por urgencia el viernes en el Pleno tras un Consejo de la Gerencia extraordinario convocado minutos antes.
Agesa asegura en sus alegaciones que se ve afectada la parcela de su propiedad en la que se halla el pabellón de la Navegación, que hay «efectos negativos» en el Patrimonio (el pabellón tiene un nivel de protección B), en el paisaje, en la funcionalidad del pabellón de Guillermo Vázquez Consuegra y en su estructura edificatoria.
Incluso pone en cuestión, igual que la Junta, la idoneidad del puente como solución al problema de la «presente y previsible de congestión viaria» de la zona, según el Ayuntamiento. Éste, en su respuesta a las alegaciones, indica que ha iniciado los trámites para un concurso de anteproyectos para dar respuesta, no sólo a las cuestiones ambientales, sino que «resolverá aquellos aspectos funcionales de movilidad y conectividad viaria».
argumentos municipales. «En este momento procedimental no se puede valorar la incidencia del nuevo enlace con el entorno. Será el estudio compositivo del proyecto, al que se le exigirá una alta calidad técnica y estética, el que se encargue de resolver todas las cuestiones técnicas y funcionales de la actuación», indica el Ayuntamiento en su respuesta a Agesa, que propuso tres opciones para el trazado del puente. Según el Gobierno local, la solución al trazado del puente entre Torneo y el extremo del pabellón de la Navegación más alejado de la torre Pelli será «respetuosa con la herencia patrimonial y paisajística».Urbanismo ha rechazado la mayor parte de las alegaciones, entre ellas, la del Instituto Municipal de Deportes, que reclamaba una compensación por la pérdida de terrenos destinados a prácticas deportivas. Se han desestimado alegaciones de asociaciones como Sevilla Se Mueve, Legado Expo Sevilla, Ecologistas en Acción, Amigos del Parque del Alamillo, Federación de Motonáutica, Naturalia XXI y la gasolinera de Torneo. Se atienden los requerimientos de la Dirección General de Bienes Culturales e Instituciones Museísticas, explicando cómo afectará el proyecto a un área protegida. Además de la exigencia de la Consejería de Cultura de un plan de tráfico que minimiza el impacto de un puente que tendrá espacio para los peatones y las bicicletas.
