El organigrama de la recién fusionada Consejería de Obras Públicas y Vivienda se conocerá hoy cuando el Consejo de Gobierno apruebe su decreto de estructura, pero la titular de este departamento, Rosa Aguilar, avanzó ayer que se creará una Dirección General de Rehabilitación Sostenible de Viviendas y Barriadas. De esta forma, la Junta da entidad a una de sus principales apuestas para salir de la crisis, que es la mejora del parque inmobiliario. Con el crédito bancario bloqueado y la vivienda nueva en grave parón, el Gobierno central y andaluz quieren impulsar la rehabilitación para rescatar a los parados de la construcción, que los sindicatos cifran en 200.000.
Aguilar se estrenó ayer en vivienda en unas jornadas sobre la nueva ley organizadas con los sindicatos. Se comprometió a que en mayo estará el borrador del Observatorio de la Vivienda, un instrumento previsto en la norma que servirá para controlar su aplicación. El secretario general de CCOO, Francisco Carbonero, aprovechó para hacer un llamamiento a las entidades financieras, que "no están a la altura", para que liberen dinero para la VPO. Aguilar pidió a los bancos que den "un paso adelante" y se mostró dispuesta a destapar a aquellos que no cumplan con su compromiso de financiación. Los sindicatos demandaron que los recortes impuestos por el plan de ahorro de Zapatero no afecten al sector, y la consejera garantizó que la previsión de recursos público-privados para financiar la Ley de Vivienda -12.000 millones- "no se van a tocar" y que el resto de actuaciones "habrá que analizarlas".
