La ministra de Igualdad, Bibiana Aído, ha advertido contra las tentaciones de "aparcar" los Objetivos del Milenio con motivo de la crisis económica o de frenar la ayuda al desarrollo y a los programas de igualdad de género. "Precisamente ahora, cuando estamos creando un sistema económico nuevo es cuando debemos avanzar en los Objetivos del Milenio y las políticas de igualdad; no nos podemos detener ni justificar nuestros escasos avances con la crisis financiera", ha subrayado.
Este ha sido uno de los principales puntos defendidos por la ministra en el acto de presentación de un estudio sobre "El progreso de las mujeres en el mundo 2008-2009. ¿Quién responde a las mujeres?" elaborado por el Fondo de Desarrollo de Naciones Unidas para la Mujer (UNIFEM).
En el acto, celebrado en la sede del Ministerio, también han participado la secretaria de Estado de Cooperación, Soraya Rodríguez, y la directora ejecutiva de UNIFEM, Inés Alberdi. Todas ellas han coincidido en subrayar que sólo apoyando a las mujeres y las políticas de igualdad será posible alcanzar los Objetivos del Milenio, ya que las mujeres son los "verdaderos motores" de los países en vías de desarrollo.
Así, han apuntado que los objetivos de erradicar la pobreza y el hambre, lograr la enseñanza primaria universal o reducir la mortalidad infantil son imposibles sin la plena implicación de las mujeres tanto a nivel familiar como de toma de decisiones políticas. "La igualdad es la estrategia básica para alcanzar los Objetivos del Milenio", ha afirmado Aído quien ha explicado que con la sola instalación de un grifo de agua potable se logra liberar decenas de horas de trabajo de las mujeres, aumenta su seguridad porque ya no deben recorrer kilómetros para conseguir agua, y aumentan la salud e higiene.
Para Aído, resulta "desgarrador" saber que las mujeres de África Subsahariana dedican 40.000 millones de horas al año a recoger agua, equivalente a un año entero de trabajo por toda la mano de obra de Francia. Así, ha argumentado que "no hay desarrollo posible sin igualdad y sin que pongamos la igualdad en el centro de la acción de cooperación y desarrollo".
