Nadie esperaba perder este partido, pero no ha podido ser. Una vez más no se ha hecho justicia. El equipo cometió algunos errores, pero ha trabajado, ha tenido intensidad e implicación, ha querido y ha tenido tres o cuatro ocasiones claras. Ellos, con menos llegadas, han decidido en dos ocasiones", lamentó Josep Maria Noguès, contento con la actitud de los suyos y algo crítico con las protestas de la afición: "La situación no es cómoda, pero estamos tres puntos encima del descenso. Al jugador le vendría mejor que el público estuviese con ellos hasta el final de los partidos. Es mejor jugar sin pancartas en contra y sin ser recriminado por el público; sería más cómodo. Al jugador hay que ayudarlo porque eso es ayudar al Betis. En los momentos difíciles es cuando debemos demostrar que esto es el Betis", dijo al respecto. "El vestuario está tocado, la gente no se ducha, está cabizbaja y dolida. Hoy no se puede recriminar al equipo que no haya peleado", añadió. El catalán agregó que "el equipo no sólo sabe lo que se juega, sino que trabaja para arreglarlo". "Hemos intentado ganar, hemos tenido ocasiones, un doble penalti en la misma jugada, un remate al larguero... El equipo se lo ha dejado todo", sentenció.
