La incógnita era si la jueza Mercedes Alaya notificaría a 24 horas de la jornada de reflexión la citación del candidato de IU, Antonio Rodrigo Torrijos, para que acuda a declarar como imputado por la venta de los suelos de Mercasevilla, después de que se filtrara el jueves. Y lo hizo. Tendrá que acudir a las 10.30 horas del próximo 8 de junio; mientras que el exgerente de Urbanismo y actual vicepresidente de la Agrupación de Interés Económico, Manuel Marchena, lo hará el 30.
Sin duda un importante golpe para IU a 24 horas de la jornada de reflexión y a 48 horas de que se abran las urnas. Por eso desde el principio la federación de izquierda ha mostrado su "indignación" ante lo que han calificado como una "injerencia inasumible" en las elecciones, por lo que pedirán a su coordinador federal, Cayo Lara, que solicite la intervención del Consejo General del Poder Judicial para que "pare la intromisión de esta jueza en el proceso electoral democrático sevillano".
Precisamente, Lara hizo referencia ayer a esta providencia, que pese a tener fecha el 16 de mayo no se notificó hasta ayer a las partes, ya que el hecho de que se conozca a horas de las votaciones "desprestigia la acción de la Justicia". "Hay jueces que ayudan al desprestigio de la Justicia", dijo en referencia a la titular del Juzgado de Instrucción número 6, Mercedes Alaya. El coordinador federal, que respaldó a Torrijos pese a su imputación poco antes de la campaña, dijo que "más que ante una actuación judicial correcta estamos ante una especie de operación respaldada por los ladrilleros sevillanos, que no tiene más sentido que montar al partido de la gaviota en el Ayuntamiento de Sevilla".
El propio Torrijos, que ya el jueves por la noche hizo alusión en los actos electorales que tenía previsto, volvió ayer a criticar la actuación de la instructora ante lo que considera un "intento consciente organizado en Sevilla de poderes no democráticos que están interviniendo en el proceso electoral y en la soberanía popular". El candidato de IU también lamentó que a día de hoy siga sin tener acceso a las actuaciones, ya que no fue hasta ayer cuando la magistrada dio por personada a su letrada, según consta en la misma providencia. "Ningún papel, ni citación, ni acceso a la documentación, que me dicen que es monstruosa de algo más de 10.000 folios, para poderla estudiar y defenderme dignamente de las acusaciones que tampoco conozco; pero esto, dentro del cúmulo de casualidades, seguro que está plenamente justificado", ironizó.
Con el mismo tono, Torrijos calificó de "casualidad" que el día antes de que IU firmara el código por la regeneración democrática "se filtrara a los medios un auto [el de la imputación] que no tengo y ahora, el 17 de mayo, se filtra que soy citado presuntamente para junio a dos días de las elecciones". "Son muchas casualidades, lo que genera una terrible indefensión y perplejidad", sentenció. Además, dijo que su formación teme "más injerencias del tea party de aquí a las votaciones".
Hasta el candidato socialista a Alcaldía, Juan Espadas, hizo ayer referencia a esta citación, considerando "significativo" que esta se conozca en este momento. "Me parece llamativo que ese auto no se produzca, por ejemplo, el lunes próximo, si eso tiene algún mensaje subliminal, a buen entendedor pocas palabras bastan", concluyó.
Pero la "indignación" de IU, que el jueves llamó a la "rebelión", se debe no sólo a la coincidencia de que la citación de Torrijos se conozca a escasas horas de las elecciones, sino al devenir de la investigación desde que se iniciara en abril de 2009. Y es que la imputación de su candidato se produjo en abril de 2011, dos años después de abrirse el caso, y a pocas semanas de que comenzara la campaña electoral. Sin embargo, era una imputación que no cogía por sorpresa porque Alaya venía señalando a Torrijos en todos sus interrogatorios. Es más, en octubre de 2010 incluso aseguró en un escrito de contestación al exdirector de Mercasevilla, Fernando Mellet, en el que aseguraba llamaría a declarar a Torrijos, aunque aclaraba si en condición de testigo o de imputado. Ya antes, en octubre de 2009, la Fiscalía anunció que iba a estudiar pedir su imputación, aunque esto nunca se produjo. Además, da la casualidad que también fue Alaya la que procesó a la número 2 de la lista de IU, Josefa Medrano, quien está pendiente de ser juzgada por prohibir un acto homenaje al escritor falangista Agustín de Foxá.
La jueza imputó a Torrijos al entender que tuvo una "participación activa" en la supuesta venta irregular de los terrenos, una de las ramas del caso Mercasevilla en la que están imputadas 16 personas.