Alberto Moreno, en la redacción de El Decano Deportivo. A. García.
Alberto Moreno, último traspaso millonario elaborado en la factoría del Sevilla, se encuentra de permiso en la capital hispalense, donde hoy se despedirá de la afición del Sevilla antes de emprender rumbo a Liverpool, su nuevo destino. El lateral zurdo, antes de su marcha, quiso pasar por la redacción de El Decano Deportivo, visita que no había podido hacer antes debido a las circunstancias que han envuelto al Sevilla durante el verano y al propio jugador, cuyo traspaso al club inglés ha sido el culebrón en los últimos meses.
Alberto es un hombre feliz. Jugar en la Premier League y en un club como el Liverpool no lo consigue cualquiera. Pero a la vez, el canterano siente pena al abandonar la que ha sido su casa durante muchos años. No en vano, se le pudo ver muy afectado tras la final de la Supercopa de Europa jugada en Cardiff, cuando no pudo contener las lágrimas de emoción. Él mismo se levantó aquel día concentrado en cómo hacerle frente a Cristiano Ronaldo. Pocas horas después, el club le comunicó que no iba a jugar la final porque su traspaso al Liverpool era ya un hecho. Ahí cambió definitivamente la vida de uno de los jugadores con más proyección del fútbol español. Siempre llevaré al Sevilla y a los sevillistas en mi corazón, reconoció en sus visita a este periódico Alberto.
Ya por la tarde emprenderá el viaje definitivo a tierras inglesas (no regresó con la expedición sevillista desde Cardiff, pues tomó rumbo a Liverpool para firmar con los reds). Allí ha sido recibido a lo grande, como un jugador llamado a marcar una época. Ya ha completado dos entrenamientos con el equipo y su obsesión es aprender pronto inglés para adaptarse a su nuevo mundo. Pero antes se despide del Sevilla con un deseo: Nos vemos el año que viene en la Champions.
