El presidente de la Corporación RTVE, Alberto Oliart, ha calificado ayer de "errónea y falsa" la afirmación, realizada el domingo por el secretario de Comunicación del PP, Carlos Floriano, de que sirve a los intereses del PSOE, motivo por el que pedía su dimisión.
Alberto Oliart señala en una nota que desde diciembre de 1982, en que finalizó su vida política, no ha pertenecido a ningún partido, ni aceptado las ofertas que le realizaron tanto desde el PP como desde el PSOE y otros grupos políticos, y que ha mantenido "celosamente" su independencia personal.
Considera que la afirmación de que es un hombre al servicio del mantenimiento en el poder de Zapatero "es totalmente errónea y, por lo tanto, falsa", así como también "errónea y no veraz" que la televisión de todos se ha convertido en la televisión del PSOE.
"La televisión pública se siente hoy más que nunca como la televisión de una gran mayoría de españoles, como ponen de relieve la audiencia que tiene y las encuestas que lo avalan", explica el presidente de la Corporación.
Oliart se muestra de acuerdo con el portavoz del PP en que él es el único responsable político de lo que ocurra o se le atribuya a la corporación: "Para mí reclamo cualquier responsabilidad respecto a todos los que conmigo trabajan".
En cuanto a la petición de dimisión, recuerda que su nombramiento es fruto de un acuerdo del Parlamento y que es éste el que puede revocarlo, revocación que ha dicho que acataría inmediatamente para volver a su "tranquila vida de jubilado".
"Entre tanto -finaliza su nota-, salvo que la salud me falle, seguiré cumpliendo con mis obligaciones de presidente ejecutivo de la Corporación RTVE, dentro de los mismos principios que han dirigido, desde entonces hasta hoy, mi actuación y decisiones: de estricta neutralidad y de defensa de los intereses que me están encomendados por la Constitución, las leyes y normas vigentes dentro del ámbito de mis competencias"
