-Sevilla acaba de vivir uno de los juicios más mediáticos. ¿Los juzgados han estado a la altura?
-A pesar de que no he tenido responsabilidades en la organización del juicio, la percepción que tengo es que se ha celebrado con total normalidad, que las medidas de seguridad han funcionado a la perfección y, además, se ha celebrado sin incidencias, pese a la aparición de nuevas pruebas que podían haberlo complicado. Como cualquier ciudadano lamento que no se haya podido determinar dónde está el cadáver, pues ésta era una de las esperanzas que tenían sus familiares. El desarrollo ha sido ejemplar y también la organización con respecto a los medios. Opinión diferente me merece el trato que se la ha dado a esa información
-¿Por qué? ¿Qué le ha parecido el tratamiento mediático?
-Por algunos ha sido absolutamente correcto. Tanto la prensa escrita como la radio ha sido bastante objetiva y se ha ajustado a lo que ha sucedido en el juicio. No puedo decir lo mismo de algunas informaciones de ciertos magacines televisivos, donde se ha distorsionado la realidad.
-¿Cree que se ha hecho un juicio paralelo?
-Algunos medios lo han propiciado y eso afecta no solo a la percepción que los ciudadanos tienen de lo que realmente ha ocurrido en el juicio, sino que además se puede haber producido vulneración del principio de presunción de inocencia que tiene cualquier ciudadano español.
-Se ha criticado mucho que a los acusados no se le haya visto la cara en el sala...
-El tribunal acertó al tomar esa medida, pues está justificada en un caso en el que se puede producir una agresión a estas personas.
-¿Ocurre lo mismo con casos como el de Ortega Cano?
-Determinados medios están ofreciendo informaciones que pudieran atentar la presunción de inocencia. Creo que se deberían tomar medidas y regular el tratamiento de la información sobre los juzgados. En la medida de lo posible hay que tratar de evitar esos juicios paralelos que ningún beneficio le aportan a la ciudadanía, que tiene derecho a recibir información veraz, y los medios a transmitirla. Esto no supone ningún tipo de censura, sino el ejercicio con responsabilidad de ese derecho a informar. También considero absolutamente necesario una autorregulación de los medios para evitar este tipo de información sesgada.
-¿Y la política? Un ejemplo es la crítica a la jueza Alaya.
-En el caso de los ERE se está intentado por ciertos políticos la descalificación de la jueza con acusaciones infundadas y supuestas relaciones que ella pueda tener con responsables de un determinado grupo. Creo que se está intentando poner en cuestión la imparcialidad de la jueza Mercedes Alaya. Es una situación intolerable, pues se pretende hacer un juicio paralelo de desprestigio de la jueza, tratando de poner en entredicho su actuación para que la ciudadanía no perciba las irregularidades que se han podido cometer.
-Acaba otro año más de crisis. ¿En qué situación se encuentra la Justicia sevillana?
-Como la Justicia española, se encuentra en una situación delicada. Se ha producido un aumento significativo del número de asuntos desde 2008, si bien en este año ha habido una reducción muy pequeña. La insuficiencia de juzgados, que ha venido siendo denunciada por mí, por la junta de jueces, por el CGPJ y por el TSJA, ha provocado que existan graves retrasos en lo Social, que está señalando a más de dos años; en lo Civil y en lo Mercantil. Se necesitan refuerzos, pero también debe avanzarse en la reducción de la ligitiosidad.
-Pero este año no se ha creado ningún juzgado nuevo...
-Y hasta la fecha no hay previsión alguna para 2012.
-¿No se van a tomar medidas?
-La junta de jueces de Sevilla ha solicitado medidas de refuerzo no sólo para los magistrados, también para los secretarios y para el personal, pues una medida sin la otra podría llegar a ser ineficaz.
-¿Cuántos nuevos juzgados necesitaría Sevilla?
-Para que nadie pueda tacharme de exagerado, me voy a remitir al informe que realizó el CGPJ y que fijaba los jugados de urgente necesidad de creación en 18. Esto no significa que son los necesarios para tener la planta adecuada.
-Tal y como está la situación, sin crear nuevos juzgados, ¿se podrá resolver o ya se arrastrará este atasco?
-Si se siguen ingresando más casos de los que se pueden resolver, el retraso continuará aumentando hasta que lleguemos a una situación de reversibilidad difícil. Los jueces siempre decimos que arreglar un juzgado es muy difícil y estropearlo es bastante sencillo.
-Después del caso Mari Luz se habló mucho de la interconexión del sistema informático, ¿se ha avanzado en algo?
-Se han conectado las bases de los juzgados de Penal y, según afirmó el consejero de Gobernación y Justicia, esa interconexión se va a extender a los demás con competencia Penal. Pero esto no resulta suficiente porque no alcanza todo el territorio nacional, que es uno de los grandes problemas, la fragmentación tanto de los sistemas informáticos como de administraciones responsables. Los avances no son suficientes.
-¿Ha cambiado algo tras las huelgas de los jueces? ¿Sirvió para algo el plante?
-Las dos huelgas de jueces, que personalmente no secundé, han servido para mostrar a la ciudadanía la grave situación en la que nos encontramos y el perjuicio que supone. En cuanto a si la situación de la administración de Justicia tras la dos huelgas de jueces ha mejorado, puedo afirmar claramente que no.
-Ciudad de la Justicia. ¿Sin comentarios?
-Cuando fui nombrado decano hace casi ocho años, mi antecesor, Andrés Palacio, y yo nos congratulamos de que ya tuviéramos una ubicación. Era el primer requisito para que esta utopía se hiciera realidad. Hoy, continuamos sin un lugar exacto para la ubicación. Me gustaría pedir a los responsables municipales y autonómicos que lleguen a un acuerdo y que ese primer obstáculo se resuelva de una vez. Y me permito instarles a que, ahora que llega el fin de mi segundo mandato, pueda volver a congratularme que ya tenemos un lugar para la Ciudad de la Justicia. No obstante, creo que es preciso de manera inmediata, una reforma de los edificios judiciales actuales.
-¿Qué le pide a 2012 como juez decano?
-Siendo consciente de la gravísima situación económica, creo que en esta legislatura debería hablarse de la necesaria reforma de la administración de Justicia. Los juzgados podemos contribuir a una mejor solución de la crisis, porque hay millones de euros depositados en las cuentas de los juzgados esperando que se resuelva un procedimiento y esto hace que ese dinero no fluya a la economía. Eso hace que empresas tengan que cerrar y que trabajadores pendientes de sus reclamaciones económicas no puedan consumir. Invertir en Justicia es rentable, pese a lo que algunos políticos piensan. Me gustaría que esta fuera la legislatura de la administración de Justicia.