Vecinos, en una calle de la barriada de La Paz de Utrera. La barriada La Paz de Utrera es una zona con numerosos problemas sociales, muchos de ellos derivados de la ocupación ilegal de viviendas que se ha producido en los últimos años por personas conflictivas. Para evitar que esta situación vaya a más se ha optado por tapiar los pisos a medida que se vayan desocupando. Este domingo se tabicaron tres viviendas, según informó el Ayuntamiento en un comunicado de prensa. El proceso que se está siguiendo para evitar las ocupaciones es bien sencillo: los vecinos, cuando se enteran de que un inmueble se ha quedado vacío lo comunican y Unicaja, propietaria de un importante número de viviendas en el barrio, se encarga de tapiarlo. Según el Consistorio, para este trabajo se contrata a oficiales de albañil de la misma barriada, que también se ocupan del mantenimiento de los pisos que son propiedad de esta entidad financiera. Desde que se acordó esta medida las ocupaciones ilegales en la barriada se han frenado, según se puso de manifiesto ayer en la reunión de seguimiento de la situación que se vive en la zona a la que asistieron el alcalde de Utrera, Francisco Jiménez (PA); la delegada de Seguridad Ciudadana, Consuelo Navarro (PA); la presidenta de la asociación de vecinos de la barriada La Paz, Dolores Brenes; y responsables de Unicaja. En este encuentro se manifestó que está descendiendo la ocupación ilegal de viviendas, al igual que se informó de que la Policía Local vigila la barriada en todos sus turnos y que cuenta con la colaboración de la Guardia Civil. El problema de La Paz preocupa y mucho al Consistorio. De hecho, en junio del año pasado el alcalde se reunió con la subdelegada del Gobierno, Felisa Panadero, en la que le planteó la situación de la barriada, puesto que en esas fechas había entre 30 y 50 pisos ocupados ilegalmente. En este encuentro el regidor indicó también que era necesario que las causas judiciales por la ocupación de viviendas de forma ilegal se agilizaran.