Toda esta información se incorpora al historial que el 061 da al hospital cuando lleva al paciente. Hasta ahora se hacía en papel y a mano, pero también desde principios de año las ambulancias trabajan con unas tablets donde el médico inserta los datos en un informe que, de momento, se imprime en la misma ambulancia, aunque la idea es llegar a enviarlo directamente a los ordenadores de los hospitales. No obstante, la mayor utilidad de las tablets para el 061 no es la transmisión de datos sino el acceso a ellos. A través de éstas pueden entrar en el historial clínico del paciente al que van a atender y conocer sus antecedentes, alergias o los fármacos que toma.
El coordinador provincial del 061, José María Villadiego, destaca su utilidad en "pacientes crónicos con muchos antecedentes y mayores que no saben decirte qué toman" o aquellos avisos en los que encuentran al paciente inconsciente. "Hasta ahora solo teníamos lo que nos contaban ellos o sus familiares o cuidadores y perdíamos mucha información", destaca. Además, las tablets permiten hacer fotos de las lesiones e incluyen una guía farmacológica que pueden consultar. En definitiva, les permiten tomar las primeras decisiones de urgencia con más datos.
Los cardiocompresores mecánicos se están instalando desde principios de año en las ambulancias sevillanas (17 aunque diariamente están de servicio once) y formándose a los técnicos para su uso. José María Rivera es uno de ellos, y reconoce que es una gran ayuda:"Tú llega un momento en que te cansas y te tiene que relevar el médico o el enfermero, pero a veces estás solo porque el médico está intubando y el enfermero con la vía". Tras Sevilla, la experiencia se está llevando ahora a Granada. La batería de los aparatos tiene una autonomía de 45 minutos pero también se pueden enchufar a la red en un domicilio o en la ambulancia. Mantener la RCP a un ritmo constante permite que el paciente llegue estabilizado.
Los análisis de sangre se hacen al modo tradicional: con jeringuilla. Se echa una gota de sangre en una tarjeta que se inserta en el aparato. En tres minutos ofrece datos sobre la presión del oxígeno y el CO2, muy útil para pacientes con problemas respiratorios, pero también de hematíes, hemoglobina, sodio, calcio o potasio en sangre.
Los ecofast, que llevan apenas unos días integrados en el equipo y aún están en fase piloto, están diseñados para medir las diferentes densidades de los tejidos que indican si existe hemorragia interna, una de las principales causas de muerte en caso de traumatismos torácicos y abdominales graves. Es un ecógrafo en miniatura que se pasa por cuatro puntos:debajo del esternón, los costados derecho e izquierdo y justo encima del pubis, según explica el doctor Antonio Ortiz. Hasta ahora, las hemorragias internas solo se podían detectar una vez ya en el hospital, con lo que llegando ya con esa información se ahorra un tiempo de hacer pruebas que puede ser vital.
