Local

Andalucía en las balanzas

El Gobierno ha hecho públicas por primera vez las balanzas fiscales, una especie de ránking de las comunidades autónomas españolas donde se pueden observar los flujos fiscales, es decir, cuánto aporta cada territorio a la caja común y cuánto recibe del Estado. Pero ha sido el propio Gobierno el que ha admitido que dichas balanzas no tienen la suficiente precisión técnica...

el 15 sep 2009 / 08:05 h.

El Gobierno ha hecho públicas por primera vez las balanzas fiscales, una especie de ránking de las comunidades autónomas españolas donde se pueden observar los flujos fiscales, es decir, cuánto aporta cada territorio a la caja común y cuánto recibe del Estado. Pero ha sido el propio Gobierno el que ha admitido que dichas balanzas no tienen la suficiente precisión técnica y que no existe consenso sobre la metodología empleada para su elaboración.

De hecho, se han presentado seis fórmulas con sendos resultados diferentes, aunque a la postre similares. La posición de Andalucía en todas ellas es muy parecida. Se sitúa entre las comunidades con superávit fiscal, es decir, entre las que recibe del Estado más de lo que aportan sus ciudadanos y empresas a través de los impuestos. Sin embargo, no es la que más obtiene del Estado. Es más, hay al menos cinco territorios por encima, ya que según el criterio establecido para elaborar la balanza se sitúa en la sexta o séptima posición si excluímos Ceuta y Melilla.

Esto es así por un factor decisivo: Andalucía tiene una población joven, activa, superior a la población pasiva de comunidades como Galicia. Sin dejar de ser absolutamente cierto que Andalucía ha sido una de las grandes beneficiadas de la solidaridad, sobre todo de los fondos europeos, las balanzas confirman que hay comunidades cuyos habitantes 'cuestan' más al Estado que Andalucía, por ejemplo, por el peso del gasto en pensiones.

Gobierno y Junta niegan que estas balanzas puedan servir para guiar el nuevo sistema de financiación autonómica porque sólo computan una parte de los fondos que el Estado da a las regiones, pero no todo. Sí sirve, en cambio, para desterrar la frase que machaconamente ha venido repitiendo el PP -el último fue Manuel Pizarro- sobre que Andalucía es la más subsidiada, algo que, a la luz de los datos, es simplemente, mentira.

  • 1