Como en años anteriores, junto con Andalucía, Castilla La Mancha y Murcia son las comunidades con menos ratio pero mientras en éstas ha aumentado el número de colegiados y la proporción de facultativos jubilados es menor, en Andalucía no sólo han bajado los efectivos sanitarios sino que teniendo en cuenta los ya jubilados su tasa es por primera vez inferior a la de castellanos y murcianos.
La propia Consejería de Salud ha alertado en varios ocasiones del creciente déficit de facultativos debido al crecimiento demográfico y a las jubilaciones, que se estima ronden el 35% de los actuales médicos en activo entre 2015 y 2025. De hecho, un 18% de los que actualmente ejercen tiene más de 55 años. La Junta calcula que es necesario incrementar un 20% las plazas para estudiar Medicina. Los colegios y sindicatos de médicos también alertan de una fuga de profesionales a otros países por la mayor estabilidad y mejores condiciones laborales que ofrecen, mientras denuncian el aumento de contrataciones de doctores extranjeros incluso antes de que les sea convalidado el título de su país.
Andalucía está por debajo de la media nacional en todas las especialidades recogidas en las estadísticas del INE sobre los profesionales sanitarios colegiados. A 31 de diciembre de 2009, la tasa de odontólogos y estomatólogos era de 0,53 por cada mil habitantes frente a los 0,58 de media nacional; la de farmacéuticos de 1,31 (1,38 en el Estado y sólo Navarra supera los dos); y la de podólogos de 0,10 (0,11 estatal).
La diferencia es mucho más elevada en el caso de los fisioterapeutas, donde Andalucía también se sitúa a la cola con 0,46 por cada mil habitantes frente a los 0,71 de media nacional (Madrid es la única que supera un fisioterapeuta por cada mil vecinos), y de los enfermeros, con 4,2 frente a los 5,5 de promedio estatal (sólo Murcia está por debajo de Andalucía con 3,3. En el extremo opuesto se sitúa Navarra, con 9,5).
En números absolutos, la comunidad cuenta con 32.740 médicos colegiados (3.100 están jubilados), 34.947 enfermeros, 10.762 farmacéuticos, 3.756 veterinarios, 4.380 odontólogos y estomatólogos, 3.826 fisioterapeutas y 860 podólogos. En estas tres últimas especialidades apenas hay colegiados jubilados.
Estas cifras suponen un descenso con respecto a los últimos tres años en los que, progresivamente, el número de efectivos había ido aumentando en todas las disciplinas. La tasa de médicos ha descendido a los niveles de 2006 después de que en 2008 se superasen los cuatro doctores por cada mil ciudadanos aunque los no jubilados se mantienen casi igual que el año pasado. También ha bajado ligeramente la de enfermeros, que se estabilizó en los tres años anteriores (de 4,3 a 4,25) y la de podólogos. Por contra, ha aumentado la ratio de odontólogos (de 0,52 a 0,53), la de farmacéuticos (de 1,29 a 1,31) y la de fisioterapeutas (de 0,43 a 0,46).
La tendencia andaluza contrasta con el crecimiento generalizado en todas las especialidades a nivel nacional.
Ellas son farmacéuticas y enfermeras, ellos médicos y veterinarios
Existe una clara diferenciación por género entre las diferentes especialidades sanitarias si bien la Junta prevé crear una Unidad de Género en el SAS ante la creciente feminización de la profesión. Así, mientras entre los médicos el 60,58% son hombres y un 39,42% de mujeres, en el caso de farmacéuticos y enfermeros hay una abrumadora mayoría de mujeres (63,58% y 73,13% respectivamente). En el caso de Enfermería, una especialidad tradicionalmente muy feminizada, de los 1.238 colegiados que tienen además el título de matrón, sólo 224 son hombres.
Las mujeres también dominan entre las fisioterapeutas (59,88% frente a un 40,13% de hombres), mientras que entre los veterinarios hay más hombres (64,8%) que mujeres (35%).
La especialidad más equilibrada en cuanto al sexo de sus profesionales es Podología: 50,2% de mujeres y 49,7% de hombres.
Fisioterapeutas y podólogos son los especialistas más jóvenes
Los fisioterapeutas y los podólogos son los especialistas sanitarios más jóvenes. Casi el 70% de los primeros y el 58% de los segundos son menores de 35 años. Hay que tener en cuenta que hasta la implantación del sistema de Bolonia, ambas especialidades universitarias eran diplomaturas de tres años, lo que contrasta con los seis años de la carrera de Medicina general a la que hay que añadir cuatro o cinco de especialidad médica.
Enfermería y Farmacia también son profesiones jóvenes.
Un tercio de quienes las ejercen tienen menos de 35 años, si bien el resto se reparten sobre todo entre los 35 y los 54 años.
Los médicos son los más mayores: el 36,04% tiene entre 45 y 54 años y son más los facultativos que superan los 55 años (18%) que los menores de 35 (15,4%). Entre los veterinarios, dominan los de 35 a 44 años (34,37%).
