Andalucía cuenta con el único impuesto en España que grava la emisión de CO2, el gran responsable del efecto invernadero, aunque con un planteamiento que sólo afecta a las grandes industrias y que en 2004 fue suavizado respecto a lo pactado en la anterior legislatura por PSOE y Los Verdes.
El PSOE reconoció haber incluido en un borrador de su programa para las elecciones generales el denominado céntimo del clima, aunque descartó también que tenga intención de aplicarlo. La alarma social por los elevados precio de los hidrocarburos no invita a especular con más recargos. La propuesta -un céntimo por cada litro de combustible- afectaría sin distinción a todos los usuarios frente al único impuesto que hay en vigor en toda España directamente relacionado con el principal responsable del efecto invernadero y el cambio climático (el CO2), que fue diseñado en Andalucía con un planteamiento más ambicioso del que ha terminado por aplicarse.
Este tributo fue negociado en Andalucía cuando Magdalena Álvarez era consejera de Economía y Hacienda, en la VI Legislatura, y dentro del acuerdo programático con Los Verdes. Fue creado para gravar la actividad contaminante de las industrias, de forma que cada cien mil toneladas de C02 emitidas se considerarían como una unidad contaminate, por la que las empresas tendrían que pagar entre 5.000 y 14.000 euros.
En diciembre de 2004 se reformó el impuesto, que había abierto el camino de la lucha fiscal contra el cambio climático. Se suavizaron los términos del tributo de forma que por emitir las mismas cantidades, se pagaría la mitad (cada 200.000 toneladas se consideran unidades contaminantes). El cambio liberó de la penalización a gran parte de los afectados, según denuncia el portavoz de Los Verdes, Andrés Sánchez.
La revisión sólo afectó al CO2 y se mantuvo en los mismos términos la fiscalidad sobre el óxido de azufre y el oxído de nitrógeno, emisiones que también grava la Xunta de Galicia. Esos gases no están considerados responsables, sin embargo, del efecto invernadero. Si se mantuvieran los criterios iniciales en todo el impuesto de emisiones a la atmósfera, Los Verdes calculan que se habría recaudado un 21% más. La organización ecologista denuncia además que en la modificación que hizo el Gobierno andaluz sólo se fijó que las industrias sólo paguen por las emisiones que tienen autorizadas, sin que se les penalicen los "excesos" sobre la cuota que tienen asignada.
Aunque Manuel Chaves aseguró que la Junta no descarta aplicar nuevas medidas contra el cambio climático, no aclaró si optará en la próxima legislatura por profundizar en la vía fiscal. La Consejería de Hacienda tampoco valoró la propuesta, si bien Griñán ya rechazó en su día aumentar la presión sobre el precio de los hidrocarburo aplicándo el céntimo sanitario.
