Si esta noticia se hubiera sabido cuando Cayetano Martínez de Irujo realizó sus explosivas declaraciones al Follonero, de seguro se habría mordido la lengua. "En Andalucía, los jóvenes no tienen el menor ánimo de progresar", dijo entonces el Conde de Salvatierra. Simón Méndez-Ferrer (sevillano de 35 años) y José Luis García-Pérez, investigador del centro Genyo en Granada, son dos de los cuatro españoles seleccionados por el Howard Hughes Medical Institute dentro de los 28 científicos más excelentes del mundo con un "potencial suficiente" para convertirse en una década en los "líderes mundiales" en sus campos de trabajo. Los escogidos han pasado una criba entre 760 candidatos de todo el mundo.
El Howard Hughes es una organización sin ánimo de lucro que apoya y promueve la investigación biomédica en el ámbito internacional. Los premiados recibirán 500.000 euros en ayudas durante cinco años y pasarán a ser parte de la comunidad científica del Instituto, entre los que hay 13 premios Nobel.
Simón Méndez-Ferrer estudió en la Facultad de Biología de Sevilla y se formó como investigador con el profesor López Barneo, con quien realizó su tesis, centrada en la búsqueda de terapias para frenar procesos neurodegenerativos. Desde 2010, trabaja en el Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares de Madrid. Tras recibir el premio, confía en que éste "sirva de estímulo para otros investigadores en Andalucía". Cree que el jurado que lo ha elegido ha valorado "la influencia que nuestra investigación ya realizada ha ejercido en nuestros respectivos campos y el potencial para desarrollar líneas novedosas y relevantes".
José Luis García-Pérez desarrolla su línea de investigación sobre elementos móviles del ADN en el centro Pfizer-Universidad de Granada-Junta de Andalucía de Genómica e Investigación Oncológica (Genyo). Asegura que recibe el premio como un reconocimiento "al trabajo". Su caso no es aislado, a juzgar por sus palabras: "Andalucía, y España en general, tiene tradición de generar muy buenos científicos". Por eso lo tiene muy claro: "No estoy pensando dejar Andalucía".
Y mientras el Instituto Howard Hughes se gastó en 2011 más de 900 millones, el Gobierno de Rajoy aboga por la austeridad también en este terreno. Ambos científicos avisan de las consecuencias. "No creo que recortar sea una buena opción. Creo que es clave apoyar a los investigadores o muchos científicos excelentes se verán obligados a salir del país", explica García-Pérez. ¿Han secundado la campaña de la casilla por la ciencia en el IRPF? "Por supuesto", subraya García-Pérez. "Lo he hecho -sentencia Méndez-Ferrer- como intento de medida paliativa de los recortes que comprometen entre otras cosas el trabajo y la producción de un gran número de científicos españoles. Sin embargo, creo que es necesario aumentar los fondos para I+d+i en los presupuestos, y no como una opción de la declaración de la Renta".
