En estos tiempos de crisis, pocas son las grandes industrias que tienen el valor de apostar por seguir invirtiendo en innovación y, principalmente, en gestión medioambiental. Ejemplo de ello es Ángel Camacho Alineación, una empresa ubicada en Morón de la Frontera, que este jueves visitó la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz.
Hasta esta ciudad se trasladó Díaz para conocer los últimos avances de la compañía, modelo de gestión empresarial. La visita a la ciudad del gallo de la presidenta del Gobierno andaluz comenzó en el Ayuntamiento. Allí llegaba a pie saludando a todos los vecinos que se encontraba en la Plaza del Ayuntamiento. A las puertas del edificio Consistorial le esperaba el alcalde de Morón, Juan Manuel Rodríguez (PSOE), además de un grupo de vecinos, caracterizados de buitres, quienes protestaban por la decisión del organismo regional de prorrogar la explotación de la Sierra de Esparteros. Tras ser recibida por el primer edil y los concejales de los diferentes partidos políticos, pasaba a firmar en el libro de honor, aprovechando el momento para conocer de primera mano la problemática del municipio. Una visita de trabajo donde «hemos tenido ocasión de hablar sobre algunos de los problemas de nuestra ciudad y donde algunos vecinos han tenido la oportunidad de trasladarle sus preocupaciones, como por ejemplo la carretera Morón-Arahal», señaló Juan Manuel Rodríguez. Unas horas fructíferas donde «in situ ha podido conocer la ciudad y las dificultades que tienen hoy día los ayuntamientos». Más tarde, Susana Díaz se interesó por el tejido industrial de la ciudad, visitando una industria local referente tanto a nivel nacional como internacional en el sector de la alimentación: Ángel Camacho Alimentación.
Esta empresa sevillana, fundada en 1897, se dedica principalmente a la producción y distribución de una amplia gama de productos alimenticios, entre los que se incluyen aceitunas de mesa, aceites de oliva, encurtidos, infusiones y mermeladas. «Una empresa familiar que se ha ido adaptando a los cambios, y que actualmente exporta el 70% de su producción a 95 países», señaló Carlos Camacho, consejero delegado de la compañía. Una sociedad internacional con filiales en EE.UU e Inglaterra donde comercializan todos los productos, y Argentina y Polonia, donde tienen varias fábricas.
Con una facturación anual de 183 millones de euros en el año 2013, es la primera envasadora de aceitunas de mesa en el mundo, procesando en torno a 60 millones de kilos. Del mismo modo, es un gran motor económico de la comarca, «generando empleo de manera directa a 827 personas, siendo 500 de la provincia de Sevilla». Unas cifras que trasladaron a la presidenta, quien conversó animadamente con las envasadoras de las aceitunas en el recorrido por las instalaciones. En concreto, la planta visitada por Susana Díaz, es una fábrica Vertido Cero desde 2008, es decir, donde se gestionan internamente todos los vertidos generados por la actividad, algo muy importante, según manifestó el presidente Ángel Camacho, ya que «desde hace años se tenía puesto el punto de mira en Morón, controlando la empresa minuciosamente este tema».
Díaz se mostró interesada en conocer la apuesta realizada por la familia Camacho en pro de la sostenibilidad y el compromiso por la política medioambiental. Los directivos, acompañados de diferentes cargos institucionales, le explicaron cómo se ha convertido en la primera empresa que ha conseguido calcular y verificar la Huella Hidráulica de sus aceitunas. Esto le aportó la información necesaria no solo para conocer en qué puntos de la producción se puede mejorar la gestión del agua sino cómo se puede contribuir a disminuir los efectos del consumo y comercio en el uso de los recursos hídricos mundiales.
Al final de la visita, el equipo directivo le relató su intención de seguir innovando, tanto en nuevos productos como en I+D, para mejorar la competitividad de los alimentos por los que Morón de la Frontera es conocida dentro y fuera de nuestras fronteras.
