Ante los avances de la investigación que conducirá a la ilegalización de Acción Nacionalista Vasca, la portavoz de ANV y cabeza de lista de la formación para el Congreso por Navarra, Mariné Pueyo, afirmó que su partido, "a pesar de todos los ataques que está sufriendo", va a estar presente en las elecciones generales "con rotundidad, con firmeza y con serenidad". Pueyo realizó estas declaraciones en San Sebastián, junto al secretario general de ANV, Txarli González y los cabeza de lista para el Congreso por Guipúzcoa, Miren Legorburu, por Álava, Aitor Bezares, y por Vizcaya, Andoni Elorrieta. La formación presentó los nombres con los que concurrirá a los comicios si la ilegalización no se lo prohíbe.
La portavoz de ANV reiteró que su formación va a estar en las próximas generales para "dar un no rotundo a la Constitución, a la represión, a la asimilación, a la negación, a la partición y al fraude político" y un "sí rotundo al cambio político, al derecho a decidir de Euskal Herria, a un nuevo marco democrático".
Asimismo, aseguró que trabajará para "poner freno y denunciar la operación política que el PSOE quiere poner en marcha, con el PNV y NaBai, para impedir la independencia" del País vasco. Pueyo señaló que la izquierda abertzale independentista quiere "poner el proceso político en el camino del verdadero cambio" y para ello es "imprescindible" que todos los que apuestan por "la soberanía de este pueblo hagan frente a la operación política diseñada por el PSOE, con la colaboración del PNV y NaBAi". A su juicio, las citadas formaciones pretenden llevar a cabo "un nuevo fraude político" contra un pueblo que "quiere el cambio".
Manifestación. Varios cientos de personas participaron ayer en una manifestación convocada en Pamplona en contra de la tortura, en la que incidieron en que las denuncias presentadas en este sentido por los presuntos miembros de ETA Igor Portu y Martín Sarasola, heridos durante su arresto, "no son casos aislados".
Los promotores del acto, que se presentaron como "personas que han sido torturadas en diferentes épocas", cifraron en dos mil el número de asistentes al acto. Durante la marcha, encabezada por una pancarta en la que se leía en euskera que "la represión no es el camino" y "no a la tortura", se corearon consignas en ese sentido así como en contra de la ley antiterrorista.
