La Comisión Provincial Urbanismo aprobó ayer definitivamente el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Écija, que sustituye al de 1987 y que, en la práctica, implica la adaptación total del planeamiento del municipio a la Ley de Ordenación Urbanística de Andalucía (LOUA). El el nuevo documento ya recibió el visto bueno de la Consejería de Obras Públicas en octubre de 2009, pero lo hizo de forma parcial porque no todas las propuestas planteadas por el Ayuntamiento de Écija se ajustaban a la legislación vigente.
En concreto, la corporación tuvo que redefinir la reserva de suelo para vivienda protegida en La Alcarrachela, "circunstancia que no reflejaba el anterior documento y que redundará en beneficio de los vecinos con menor nivel de renta", según fuentes de Obras Públicas. También cambió la calificación de terrenos en el área de San Cristóbal, que pasan a considerarse como suelo urbanizable no sectorizado, por lo que su uso será incompatible con fines de tipo industrial o turístico. Por último, la pedanía de Isla del Vicario queda calificada como suelo no urbanizable de carácter rural o natural, en lugar de la consideración de hábitat diseminado que figuraba en la propuesta inicial del Ayuntamiento de Écija.
Solventados esos puntos, el PGOU cuenta desde ayer con el aval de la Junta de Andalucía. El nuevo planeamiento reserva suelo residencial para la construcción de hasta 5.140 viviendas, de las que en torno al 40% serán de VPO, con una previsión de incremento de población del 30% (12.336 habitantes que se sumarían a los 41.163 registrados ahora en el padrón). El municipio verá incrementado el volumen de suelo urbanizable en 269,83 hectáreas, un 39,3% más del nivel fijado en 1987. El documento incluye también "una decidida apuesta por el desarrollo industrial" del municipio.
