Casi un centenar de arquitectos y personalidades del mundo de la cultura, las artes y la ciencia firmaron un manifiesto en contra de la mudanza del Caixafórum de las Reales Atarazanas a la torre Pelli de la Cartuja, un nuevo frente común que se suma al anunciado por la Junta para que Caixabank respete el convenio para la restauración de los astilleros medievales, del propio Ayuntamiento, así como de los agentes del sector turístico. Sólo la Fundación Atarazanas -que critica duramente el proyecto del arquitecto sevillano Guillermo Vázquez Consuegra- se ha mostrado en contra de que el Caixafórum siga en el Arenal.
Destaca el apoyo que recibe el proyecto de Vázquez Consuegra de prestigiosos compañeros de la profesión como Rafael Moneo, Premio Pritzker de Arquitectura, y de Emilio Tuñón Álvarez, Ángela García de Paredes Falla, Ignacio García Pedrosa, Carlos Ferrater Lambarri, Oriol Bohigas Guardiola o Francisco Mangado Beloqui, todos ellos Premio Nacional de Arquitectura, a los que también se suman prestigiosos arquitectos como Juan Trías de Bes, Roberto Terradas Muntañola, Jordi Garcés, Antonio González Cordón o Antonio Carbajal Navarro.
El manifiesto, hecho público ayer por las Asociaciones ciudadanas Sevilla Se Mueve (SEm) y Sevilla Abierta (ISA), también lo firma Mario Botta, director de la Academia de Arquitectura de Mendrisio, en Suiza, así como personalidades del mundo de las Artes como Luis Gordillo, Carmen Laffón, Juana de Aizpuru, Víctor Barrera y Gonzalo García Pelayo. Fernando Amores, reputado arqueólogo, o catedráticos como Salvador Rodríguez Becerra, Agostino Bossi de la Federico II de Nápoles, Sami Nair, Juan Marchena y Antonio Villar también lo refrendan, lo mismo que los investigadores José López Barneo y Guillermo Antiñolo.
El presidente de ISA, Eliseo Monsalvete, y el vicepresidente de SEm, Manuel Fernández, recordaron que el Pleno municipal ya instó a que el Caixafórum se ubique en las Atarazanas y añadieron que se están recogiendo a través de internet adhesiones de ciudadanos al manifiesto, que hasta ayer sumaba más de 1.500 firmas.
Ambas asociaciones reclaman que tanto La Caixa como el Ayuntamiento desistan de su decisión "de dejar morir el proyecto Caixafórum Atarazanas", que ambas instituciones "no dejen perder la inversión privada comprometida" para la rehabilitación, que "dejen de actuar pensando exclusivamente en sus intereses políticos y económicos y que tengan en cuenta un bien mayor: que la mayoría de los sevillanos apoya, respalda y desea que en las Atarazanas se construya un centro cultural de vanguardia, respetuoso con el patrimonio".
Por su parte, agentes del sector turístico de la ciudad también mostraron ayer su rechazo a que el Caixafórum se instale en el rascacielos de la Cartuja que Caixabank ha heredado a medio construir tras la absorción de Cajasol.
José Miguel Nicolás, presidente de la asociación de agencias de viajes, aseguró a este periódico que el proyecto debe mantenerse porque las Atarazanas son la ubicación "ideal" al estar en el núcleo histórico-artístico de la ciudad y tener fácil acceso. "La torre Pelli tiene un atractivo turístico por sí, así que la decisión de La Caixa es un parche exclusivamente por motivos económicos". Desde el sector hostelero, Antonio Palomino opinó que sería "una oportunidad perdida" si el Caixafórum se va de las Atarazanas, una opinión que comparte con los responsables del sector hotelero e incluso de los guías turísticos.
