Justo un año después de que los juzgados de lo Penal se trasladasen al edificio puente, liberando el inmueble del Prado, la reforma de éste ha comenzado. En concreto, los trabajos iniciados por la Delegación provincial de Gobernación y Justicia de la Junta de Andalucía son la ampliación del la Clínica Médico Forense del Instituto de Medicina Legal, que en la actualidad se encuentran en el sótano del edificio del Prado y cuenta con unas instalaciones obsoletas. El presupuesto destinado es de 183.000 euros y el plazo de ejecución es de dos meses y medio, con lo que entraría en funcionamiento en el mes de abril.
La remodelación forma parte de un plan integral que retomó la ex consejera de Justicia Evangelina Naranjo, ante el retraso de la Ciudad de la Justicia, y después de que su antecesora, María José López, cambiara la ubicación de ésta de Los Gordales al Puerto, ante las dificultades para disponer del suelo. Naranjo retomó el proyecto original, incluido el edificio puente para mejorar las instalaciones judiciales hasta concluir la Ciudad de la Justicia.
De esta forma, en abril de 2009 Naranjo inauguró el denominado Edificio Noga, coincidiendo con la puesta en marcha del segundo juzgado de lo Mercantil de la ciudad. Sin embargo, no fue hasta final de 2009 y principios de 2010 cuando los órganos de lo Penal se mudaron al nuevo inmueble, situado en la avenida de la Buhaira. Desde entonces, el edificio del Prado tiene gran parte de su espacio desocupado y sin uso alguno.
La clínica se trasladará tras las obras al ala derecha de la primera planta del edificio, donde anteriormente se encontraban varios juzgados de lo Penal. Con estos trabajos la clínica, que en la actualidad está muy deteriorada (falta de medios, humedades, etc..), contará con más de mil metros cuadrados en los que albergará 16 consultas individuales. Asimismo, dispondrá de sala común de médicos forenses, sala de reuniones, secretaría, archivo y dos almacenes. Además, el Instituto de Medicina Legal ubicará sus departamentos de administración, secretaría y dirección.
El resto de la reforma del edificio del Prado se limitará al adecentamiento de algunos de los despachos ocupados por el Juzgado de lo Penal número 8, donde se ubicará el segundo juzgado de Vigilancia Penitenciaria de la ciudad, que entrará en funcionamiento a final de año. En cambio, el Juzgado de lo Penal 15, que también se inaugura este mes, no se ubicará en el Edificio Noga por falta de espacio, pese a que sólo lleva funcionando año y medio, y se instalará en el edificio de la avenida de la Buhaira que acoge los juzgados de Familia. El plan de mejora se completa con la reforma de la Audiencia, un proyecto valorado en más de tres millones de euros para el que no hay fecha de inicio.
El Instituto cuenta con 36 médicos forenses de los que 25 pertenecen a la Clínica Forense, que se encargan de los peritajes médico-legales, control periódico de lesionados y valoración de daños corporales que sean objeto de actuaciones procesales y la asistencia de los detenidos que se encuentren a disposición judicial.
