Después de que la semana pasada comenzaran las labores de desbrozamiento en El Vacie, esta semana ha sido el turno de la limpieza. Varios vehículos de Lipasam trabajan desde el lunes en el asentamiento chabolista y ya han limpiado 41.000 metros cuadrados de terreno. Este viernes se iniciarán también los trabajos de allanamiento del terreno. El objetivo a corto plazo, según la delegada de Familia y Asuntos Sociales del Ayuntamiento de Sevilla, Dolores de Pablos, es "el adecentamiento" de la zona. A largo plazo, señaló, lo que se pretende es "la erradicación y un trabajo social con la población del asentamiento". Una tarea que no se plantea sencilla.
"Lola, a ver si haces algo por el barrio, que esto no es justo, no es digno de vivir", le espetó Rosario, una señora que vive en El Vacie y que tiene nueve hijos. "La chabola de mi hija salió ardiendo", continuó, "y ayer había una rata por encima del sofá".
De Pablos, por su parte, respondió pidiendo que se de al nuevo gobierno local la oportunidad de actuar y aseguró que "se limpiará las veces que haga falta". Rosario, que admitió que tres de sus hijos han sido realojados "por enfermedad", se mantenía en sus treces. "Yo le he dicho lo mismo a los cinco delegados que han pasado", aunque reconoció que "esta señora ha venido ya dos o tres veces".
En todas esas veces, la condición que el Ayuntamiento ha puesto sobre la mesa es la colaboración y la corresponsabilidad que le exigen a los vecinos del asentamiento. La delegada, que visitó ayer el poblado acompañada de Juan José Cortés, el padre de Mari Luz, que está directamente implicado en el plan de El Vacie, declaró que se mostraba "muy ilusionada". El motivo era una reunión en la que estuvieron presentes doce representantes de 90 familias chabolistas para escuchar sus propuestas y pactar las líneas y el calendario de actuación.
"Es histórico", declaró De Pablos, destacando que era la primera vez que las propias familias se habían organizado y habían elegido a sus interlocutores para dialogar con el Ayuntamiento.
Tras la reunión, fuentes del consistorio señalaron que el balance era "muy positivo". Apuntaron que las peticiones de las familias, además del adecentamiento para evitar riesgos de incendios y la mejora de las condiciones de higiene, pasan por la puesta en marcha de planes de formación, la demanda de empleo y la instalación de servicios.
No obstante, desde el Consistorio no se ha concretado ningún calendario para materializar las propuestas ni tampoco para continuar con los realojos. Por contra, señalan que los plazos se van a pactar con las propias familias y que hasta entonces no se harán públicos. Lo que sí mantienen es su esperanza de erradicar el chabolismo. Así lo confirmó Juan José Cortés, que destacó la predisposición de los chabolistas. "No es lo mismo actuar desde la oferta que desde la demanda. Se trata de escucharles y de comprometernos".