La Guardia Civil detuvo el sábado por la noche al jefe de la Policía Local del municipio serrano de EL Molar, así como a dos guardias civiles y a otras 15 personas, todos ellos acusados de pertenecer a una red de tráfico de estupefacientes. Entre los arrestados hay personas de varias nacionalidades.
El cabo Tomás Felipe Boto se encuentra detenido en el cuartel de la Guardia Civil de San Agustín de Guadalix, y previsiblemente prestará hoy declaración en los juzgados de Alcobendas.
Además, la secretaria de Organización Territorial del PP de Madrid, Cristina Cifuentes, explicó que el Instituto Armado "registró la casa del jefe de Policía", aunque negó conocer cuáles son los delitos exactos que se le imputan. "Lo que nos han dicho oficiosamente es que podría haber un delito de tráfico de estupefacientes y algún otro más, pero no nos han concretado", apostilló.
De hecho, algunos vecinos del pueblo declararon que "todo el mundo sabía" que en el pueblo existía "trapicheo", y recalcaron que hacía varios años que se conocía que "la Guardia Civil estaba implicada". En referencia al jefe de la Policía Local, los vecinos de El Molar subrayaron que "se sabía que era una persona rara y conflictiva" y con frecuencia se le veía "bebiendo y con comportamientos raros".
"Con lo que ha pasado últimamente", dijo Cifuentes en referencia al escándalo del caso Bloque en Coslada, "este tipo de cosas hace un flaco favor a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, pero en este caso es algo aislado y hay que esperar primero a que se confirmen las investigaciones", insistió, para después ofrecer toda su colaboración a la Justicia.
