Enérgica ha sido la protesta de la patronal agraria Asaja de Sevilla por la nueva distribución de las ayudas a los cítricos, hasta el punto de dirigirse por carta al presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, porque, dice, tampoco su consejero de Agricultura, Isaías Pérez Saldaña, al margen de firmar el documento por el que se reclama volver al sistema de reparto pactado, no ha puesto especial empeño debido al periodo electoral. Léase, no interesaba un enfrentamiento entre dos administraciones de igual signo político.
De hecho, la asociación que preside Ricardo Serra asegura que es la primera vez en la legislatura que el Ministerio cambia "unilateralmente" una decisión adoptada en el seno de la Conferencia Sectorial de Agricultura, y no duda en atribuirlo a razones electorales: que María Teresa Fernández de la Vega fuera por Valencia como número uno del PSOE al Congreso de los Diputados.
En la misiva de Asaja a Chaves, Ricardo Serra le insta a que "haga cuanto esté en su mano para que no se cometa este atropello [...] y que pueda resolver este agravio para los intereses de Andalucía".
La andaluza es la segunda comunidad española en producción de cítricos, con 1,44 millones de toneladas recolectadas en alrededor de 65.600 hectáreas y una aportación del 9,6% al valor de la Producción Final Agraria (PFA) regional.
El 71% de la cosecha de cítricos corresponde a la naranja, de ahí que se reclame la separación de variedades a la hora de distribuir las ayudas que proceden de las arcas comunitarias.
