Seria llamada de atención del arzobispo Asenjo al Consejo de Cofradías y a las hermandades en general. Una semana después de que la dimisión irrevocable del presidente del Consejo de Cofradías, Adolfo Arenas, desatara una crisis sin precedentes en el orbe cofradiero, al fin ayer el arzobispo de Sevilla rompía su silencio en torno a este asunto.
Lo hacía, a preguntas de los periodistas, en la Fundación Antares, donde ha pronunciado la ponencia titulada ‘La Iglesia de Sevilla en el inicio del Año de la Fe'. El prelado sevillano lamentó los "sobresaltos" que han sacudido a las hermandades en los últimos días e instó a las cofradías, y en particular a sus juntas de gobierno, a que sean "muy cuidadosas" para que episodios como el vivido hace una semana -cuando la disputa entre dos facciones en el seno de la junta superior del Consejo derivó en la renuncia de su presidente- no se vuelvan a repetir.
"Yo siento que, de tanto en tanto, el mundo de las hermandades nos den estos sobresaltos, que perjudican a las propias hermandades y a sus órganos y desde luego perjudican y dañan a la Iglesia. En ese sentido, yo pediría a todas las hermandades y a los órganos colegiados que las representan que fuéramos muy cuidadosos. En definitiva -recordó Asenjo- se tratan de instituciones eclesiales, erigidas por la autoridad eclesiástica como asociaciones públicas de fieles, que buscan el culto a los sagrados titulares, el incremento de la vida cristiana de sus miembros, su formación cristiana y el servicio a los pobres. Y eso tendría que ser lo que a todos nos tendría que preocupar prioritariamente. Vuelvo a repetir que con este tipo de acontecimientos quien padece realmente es la Iglesia".
El arzobispo quiso aclarar cuál había sido realmente su participación en la dimisión de Adolfo Arenas :_"Yo me he limitado a constatar que don Adolfo Arenas había presentado la renuncia a su oficio, a su cargo de presidente del Consejo General de Hermandades y Cofradías. En realidad, él no presentó la renuncia ante el arzobispo, sino ante el delegado diocesano. Creo que no es necesaria la aceptación, y de hecho yo no la he aceptado. Yo me he limitado a constatar que don Adofo Arenas había presentado la renuncia y, bueno, nosotros de acuerdo con los estatutos dejamos que se cumplieran las previsiones que establecen los propios estatutos: la sucesión por el vicepresidente".
Preguntado por si Adolfo Arenas merecía otra despedida más calurosa, Asenjo replicó: "Yo respeté su decisión. Desde luego le llamé por teléfono. No es cierto que yo no le haya llamado. Le llamé por teléfono para preguntarle en primer lugar cómo estaba y manifestarle mi aprecio, mi afecto, asegurarle mi amistad y brindarme para servirle a él y a su familia si en algo podía en el futuro".
Antes de fotografiarse por vez primera en público con el nuevo presidente del Consejo de Cofradías, Carlos Bourrellier, el arzobispo también se refirió al ponunciamiento del Tribunal Constitucional sobre los matrimonios homosexuales. Asenjo aseguró que respeta la decisión del Tribunal Constitucional, si bien, desde una "conciencia creyente", mostró su profunda discrepancia con este aval legal al matrimonio gay: "Lo que no se fundamente en la ley natural, por mucho que lo sancionen los tribunales o las magistraturas, no por eso es una cosa buena. Una cosa es lo legal, y desde hoy parece que los llamados matrimonios homosexuales son más legales que antes, y otra cosa es este asunto desde una perspectiva moral".