Economía

Astilleros de Sevilla comunica el despido de toda la plantilla

El administrador único presenta al juez el ERE extintivo para los 53 empleados que aún quedan.

el 14 oct 2011 / 09:38 h.

El cierre de Astilleros de Sevilla está un paso más cerca. Hace unos días el administrador único de la empresa, José Luis Álvarez, presentó el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) extintivo ante el juez, lo que, de salir adelante, supondrá que la totalidad de la plantilla se quede en la calle y que la histórica industria naval sevillana llegue a su fin.

Según fuentes del comité de empresa, aunque esperaban que el ERE se presentara a los trabajadores esta semana, este trámite tendrá que esperar unos días hasta que el administrador único, que es el que tiene que negociar las condiciones con el comité de empresa, "vuelva de vacaciones".

Ahora, le toca al juez, que ha instado a la liquidación del astillero, el papel de decidir si el ERE extintivo va o no hacia adelante sin actividad y sin ingresos. En total, se aplicará a los 53 trabajadores con los que aún cuenta la factoría, después de que los antiguos de Izar recibieran su carta de despido, que se llevó a cabo el pasado 30 de septiembre. A ellos se les ha respetado los acuerdos de entonces -entre los que estaban las prejubilaciones-.

El problema es qué pasa con los 53 que saldrían de la factoría, ya que, según las mismas fuentes, es probable que la empresa quiera despedirlos con el mínimo legal -esto es, 20 días por año trabajado-, lo que supondría la vuelta a las movilizaciones de la plantilla. Por ello, quieren conocer cuanto antes las condiciones.

"Su situación es muy mala porque como llevamos en concurso de acreedores desde hace un año, muchos de ellos han agotado ya su prestación por desempleo y saldrían a la calle prácticamente sin nada", señalaron.

De llevarse adelante el proceso, Astilleros de Sevilla entraría en proceso de liquidación. Así, lo primero es intentar recortar los máximos gastos posibles -las nóminas, por ejemplo- y después saldría a subasta. En el caso de que no hubiera comprador -la Junta lleva buscando inversores más de un año y medio sin éxito para reactivar la factoría a pesar de tener tres barcos en cartera-, se liquidarían los activos, esto es, la maquinaria y todo lo que hubiera a excepción del terreno, que pertenece al Puerto de Sevilla, según las fuentes consultadas.

Indignación con la Junta. Tras ocupar por sorpresa el pasado jueves la sede de la Delegación de Empleo de la Junta, la plantilla salió del edificio con la "promesa" de una reunión con la delegada, Aurora Cosano para tratar el futuro de la factoría. Sin embargo, los representantes de los trabajadores recibieron ayer una llamada de la secretaria de Cosano para anular la cita prevista para el próximo día 21 y no les transmitió ninguna fecha, ya que, según las fuentes, "alegó que no tiene competencia en este asunto".

"Por lo menos nos podía haber escuchado y decirnos si hay posibilidad de establecer una mesa de negociación, pero nos ha rechazado y eso nos ha indignado muchísimo, porque nos hemos sentido ninguneados", declaró ayer el secretario del comité de empresa, Joaquín Martínez, quien pidió la dimisión de la delegada de Empleo.

Siguiendo con sus protestas, el próximo 20 de octubre un grupo de 25 trabajadores de astilleros iniciará una marcha reivindicativa a pie hacia Madrid. Esta marcha se efectuará en dos trayectos desde Sevilla a Córdoba, durante cinco días, donde protestarán especialmente por la "incompetencia de la Junta en el tema astilleros"; y la segunda parte a pie, desde Ocaña (Toledo) hasta Madrid, de tres días de duración, para "involucrar en nuestra lucha al Ministerio de Industria, que fue el que nos privatizó y llevó a la ruina a los astilleros".

Las fuentes indicaron que en la salida el 20 de octubre habrá previamente una manifestación de todos los trabajadores, dirigentes sindicales, familiares, amigos y excompañeros por las calles de Sevilla hasta San Jerónimo, desde donde los 25 trabajadores saldrán en solitario hacia Córdoba. En esa ciudad también está prevista otra manifestación.

  • 1