Un grupo de radicales atacó la madrugada de ayer el batzoki (sede social) que el PNV tiene en la calle Zumalakarregi de la localidad guipuzcoana de Tolosa, contra el que lanzaron cócteles molotov. Las personas que había en el interior del local tuvieron que ser desalojadas aunque ninguna de ellas sufrió heridas, según informaron fuentes de la Ertzaintza.
El ataque tuvo lugar a la 1.10 de la madrugada cuando los autores lanzaron uno o varios artefactos incendiarios contra la fachada trasera de la sede social del PNV. El fuego prendió un estandarte que colgaba de la fachada, por lo que las personas que estaban en su interior abandonaron el local. Un retén de los bomberos se desplazó al lugar pero a su llegada el fuego ya estaba extinguido. Las llamas provocaron el ennegrecimiento de la fachada trasera del batzoki y afectaron también a un vehículo estacionado junto al inmueble.
Las reacciones a esta nueva agresión de los radicales no tardaron en llegar. Así, la presidenta del PP de Guipúzcoa, María José Usandizaga, condenó ayer el ataque y prometió que el nuevo Gobierno Vasco, al que su partido previsiblemente apoyará, "se va a volcar" contra "estos vestigios de violencia y fundamentalismo que aún perduran" en Euskadi. En el mismo sentido se expresó la Comisión Ejecutiva Federal del PSOE, que manifestó su "más enérgica" condena por el atentado. Por último, el teniente de alcalde de Tolosa, Jokin Azkue (PNV), condenó también el ataque al tiempo que recordó que este tipo de acciones violentas "en absoluto ayudan a que se dé el proceso de paz que todos ansían y desean". Azkue, por último, destacó que "todos" deben "esforzarse y poner su granito de arena para el definitivo proceso de paz en Euskadi".
