Al menos 18.000 personas mueren al año en España por enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), más de 1,5 millones la padecen, y cerca del 70% de los afectados no están diagnosticados, según explicó ayer el presidente de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica, el doctor Julio Ancochea.
El infradiagnóstico y la "gran comorbilidad" se traducen, entre otras consecuencias, en una elevada mortalidad, sobre todo por cáncer de pulmón y enfermedades cardiovasculares. Además, las previsiones apuntan a que en los próximos 10 años habrá un incremento de la enfermedad de más del 30%, y para el año 2020 se habrá convertido en la tercera causa de mortalidad a nivel mundial, por detrás de los problemas cardiovasculares y el cáncer.
La incidencia de la EPOC ronda los 60 casos por 100.000 habitantes entre los varones y los 17 casos en las mujeres, aunque la enfermedad está aumentado en estas últimas debido a su incorporación al tabaquismo.
Además, esta enfermedad consume el 2% del presupuesto de la sanidad pública, alrededor de 3.000 millones de euros anuales, que "se traducen en costes directos e indirectos por la enfermedad".
Entre las causas que producen la EPOC se encuentra el tabaco, tanto activo como pasivo, la contaminación exterior y los productos químicos aplicados al medio laboral. Por este motivo, el presidente de la Asociación Española de Pacientes y Familiares de EPOC, Mario Bofill Pareras, demandó mayores medidas por parte de la Administración para atajar estas causas.
