Bacca celebra su gol al Espanyol (Marcamedia)
Decir adiós a un futbolista que la pasada campaña marcó nada menos que 31 goles entre Liga y Copa del Rey trae consecuencias. La más importante de todas, lógicamente, es el déficit que a priori deja en lo que a producción goleadora se refiere, y ésta ha sido siempre la gran preocupación del Sevilla tras la marcha de Álvaro Negredo. El internacional español, actualmente en el Manchester City tras ser traspasado este verano por una importante suma de dinero, dejó un vacío enorme que tapar. Por ello, Monchi se movió rápido para reforzar una delantera totalmente nueva, al marcharse Babá y Manu del Moral, éste último también utilizado como punta habida cuenta de la escasez de efectivos.
Rusescu, Kevin Gameiro y Carlos Bacca fueron los elegidos por la dirección deportiva. Tres apuestas de distintas características pero que poco a poco están dando frutos en el caso del francés y del colombiano, ya que por ahora el rumano está teniendo poco protagonismo.
En el caso de Gameiro, el ex del París Saint-Germain ha dejado muestras de la calidad que atesora, pero sus problemas físicos le están impidiendo ofrecer un rendimiento continuado. Pese a ello, suma ya seis goles entre Liga (cuatro) y Europa League (dos).
La lucha por un puesto de titular se ha encarecido. La pasada campaña no había quien tosiera a Negredo, mientras que ahora Gameiro y Bacca se disputan la plaza en el once, ya que, aunque ha habido excepciones en las que Unai Emery alineó a dos desde el inicio, habitualmente juega con un solo punta nato. Por ello, no queda otra que aprovechar las oportunidades, y eso es lo que está haciendo especialmente el internacional colombiano, quien, junto a Rakitic, se ha situado ya como máximo realizador del Sevilla. Su gol al Espanyol clave en la victoria le permite elevar su cuenta hasta los nueve tantos (cinco en Liga y cuatro en competición continental).
Aunque fue el jugador que marcó el primer gol del equipo en partido oficial (Mladost Podgorica), tuvo que esperar hasta la sexta jornada para estrenarse en el campeonato liguero, donde Gameiro le ganaba el pulso. Ese día, frente al Rayo, el colombiano anotó dos goles. Luego tuvo que esperar hasta la novena jornada para ver puerta nuevamente, en Valladolid. Su tercer gol llegaría en la undécima jornada, ante el Real Madrid. Y el quinto y último en Liga, este pasado domingo.
EL ESPEJO DE NEGREDO. Bacca pisa fuerte y parece dispuesto a hacer olvidar a Negredo. Palabras mayores, sí, pero sus números actuales recuerdan que lleva ya nueve goles entre Liga y Europa League. El vallecano, por su parte, sin competición continental pero con la Copa ya en escena, llevaba siete tantos en Liga a estas alturas la pasada campaña dos más que el punta colombiano y uno en el torneo del KO.
EL MEJOR RAKITIC APRIETA. Si brillante está siendo este primer tramo de temporada para Bacca, no menos lo es para Rakitc. El internacional croata acumula siete goles en Liga y dos en la Europa League, siendo pichichi en solitario del equipo hasta el pasado fin de semana.
Rakitic se encuentra a sólo dos goles de igualar el registro que firmó en el curso 2012/13. Entonces, el capitán nervionense marcó once (ocho en el campeonato doméstico y tres en Copa), siendo tras Negredo el segundo máximo artillero del Sevilla, por delante de Gary Medel (siete), Fazio (cuatro) y Reyes (cuatro).
