El municipio de Barbate (Cádiz) volvió ayer a dar un puñetazo en la mesa. Más de 800 personas se movilizaron para protestar por la "desastrosa" situación en la que se encuentra el pueblo, en el que 300 trabajadores municipales llevan "cuatro meses" sin cobrar sus nóminas, una situación "insostenible", dicen los sindicatos, a la que se suma "un índice de paro gravísimo".
El Ayuntamiento de Barbate (23.000 habitantes) es de los más asfixiados de Andalucía. Desde el pasado verano los empleados municipales que han dejado de percibir sus ingresos, pero no han interrumpido su actividad, han venido manifestándose cada semana, cada mes. Poco a poco se han ido uniendo sus familias, sus amigos, sus vecinos.
El portavoz de CCOO en el consistorio, Roque Vázquez, se mostró "muy satisfecho" por la "masiva" participación en la manifestación de ayer, convocada por su sección sindical junto con FSP-UGT. Cientos de personas se apostaron por la mañana frente a un centro comercial a la salida de la población para dirigirse a la avenida principal de Barbate, portando carteles con mensajes desde "Barbate no merece tanto paro ni tal maltrato" o "Socorro, nos hundimos".
La manifestación concluyó en la plaza del Faro, donde los portavoces de los sindicatos leyeron sendos manifiestos con las principales reivindicaciones de los trabajadores. "Barbate vive en crisis permanente", lamentó Vázquez, "pero se ha agravado con la falta de pago a los trabajadores municipales, que eran de los pocos que mantenían un sueldo medio digno". "El índice de paro es gravísimo, hay familias enteras viviendo de la pensión de los abuelos y algunos trabajadores han tenido que recurrir al Banco de Alimentos, Cáritas o la asociación de Amigos Solidarios de Barbate", sostuvo el portavoz sindical. Los comerciantes y empresarios del pueblo han colaborado con su "ayuda" con los afectados y han "contribuido a mejorar la situación de los trabajadores".
Los sindicatos no valoraron igual el papel del Ayuntamiento y del equipo de gobierno, liderado por el alcalde socialista Rafael Quirós. Justo ayer el consistorio les citó para anunciarles que "todos los trabajadores han percibido 800 euros, correspondientes a parte de la nómina de julio", algo que los sindicatos consideran "una ridiculez".
Parte de dicha cantidad procedería de los 300.000 euros que Banca Cívica abonó el viernes como consecuencia de un acuerdo procedente de una orden irregular de pagos (OIP) con la Diputación de Cádiz, aunque según CCOO habría sido necesario "algo más que tuviese guardado el Ayuntamiento" para ingresar 800 euros a todos. Este dinero supone un "10%" de lo que les resta por cobrar. "El alcalde nunca ha hecho frente común con los trabajadores, aunque tiene parte de culpa, no es el único responsable", dijo Vázquez. Mañana los afectados prevén reunirse en asamplea para aprobar medidas más duras de presión.
