El senador y tesorero del PP, Luis Bárcenas, implicado en el caso Gürtel, presentará a Mariano Rajoy su dimisión si el Tribunal Supremo pide al Senado el suplicatorio, es decir, la autorización para investigarle por ser sospechoso de delitos de cohecho y fraude fiscal.
Fuentes del PP han confirmado a Efe la intención del tesorero de la organización, cuya permanencia en el puesto obedece a muchos factores, aunque dos han pesado por encima de otros: la amistad personal con Rajoy y la influencia de varios pesos pesados del partido, especialmente Javier Arenas, uno de los principales asesores del presidente en este asunto.
Y esa amistad labrada con el paso de los años ha forjado entre Rajoy y Bárcenas una relación de mutua confianza, de tal modo, apuntan las fuentes consultadas, que el segundo ha reiterado su seguridad de en la investigación no habrá indicios que lleven a la Justicia a imputarle. El presidente del PP ha creído al tesorero hasta el extremo de mantenerle en el cargo pese a la oposición del "95% de las bases".
Rajoy es consciente del malestar de sus correligionarios, no tanto de la dirección, que ha apostado por entregar a su máximo mandatario toda la responsabilidad de la gestión de un caso que, según han destacado muchos miembros del partido, podría haberse desactivado hace tiempo.
Además, ayer se supo que Francisco Camps, presidente valenciano, estaba en Valencia los días en los que aseguró al juez que se encontraba en Madrid pagando los trajes por los que está siendo investigado. El juez pidió la agenda oficial de Camps para contrastar esa afirmación y, según publica el diario Levante, en los días en que las tiendas ingresaron los pagos de los trajes Camps tenía diversos actos oficiales en la Comunidad Valenciana.
