Todas las miradas están puestas en él. El actor español Javier Bardem (Gran Canaria, 1969) recibe estos días multitud de halagos de estrellas como Sharon Stone o Tommy Lee Jones. Hollywood y el mundo entero se han rendido a su interpretación en No es país para viejos, que el próximo domingo puede darle un Oscar.
El cine patrio tiene este año a dos representantes españoles entre los nominados a los Oscar de la Academia de Hollywood. A menos que nos sorprenda el compositor Alberto Iglesias, responsable de la banda sonora de El jardinero fiel y nominado este año por la de Cometas en el cielo, las esperanzas están puestas en el actor Javier Bardem, que con su papel de asesino en serie y sin escrúpulos en la película de los Hermanos Coen No es país para viejos, tiene todas las papeletas para hacerse con la preciada estatuilla.
En caso de que ganara, sería la primera vez que un actor español se llevara un Oscar, si bien el propio Bardem ya fue candidato por Antes que anochezca en 2002 y la bella Penélope Cruz (a la sazón actual pareja sentimental de Bardem) también optó el año pasado a alcanzar la gloria de Hollywood su papel en la última película de Pedro Almodóvar, Volver.
Hasta ahora, los 15 Oscar que se ha llevado el cine español nunca han recaído en las tareas interpretativas, por lo que Javier Bardem se enfrenta a un momento realmente histórico para el séptimo arte nacional. Pero sobre todo, el actor español encara estos días la semana más decisiva de su trayectoria profesional. Y es que, aunque en un principio, el intérprete de películas como Boca a boca o Mar adentro, se quisiera hacer el remolón cuando empezó a coquetear con Hollywood, lo cierto es que en unos meses ha pasado a codearse con las estrellas más brillantes del firmamento hollywoodiense.
Su negación para el inglés, causa primera de su negativa a actuar en Hollywood, no fue suficiente para la maquinaria estadounidense, que acabó convenciéndole para participar en Collateral o El amor en tiempos del cólera, y posteriomente aceptar la oferta de los hermanos Coen para No es país para viejos.
Así, actores de la talla de Sharon Stone, Kathy Bates o sus colegas en No es país para viejos, Josh Brolin y Tommy Lee Jones, y los propios Coen, no dejan de piropear al Bardem actor y, también, al Bardem persona. Además, la crítica se ha rendido a sus pies y no ha dejado de ganar premios por este papel. En total, 16, incluido el Globo de Oro, que no pudo recoger debido a la suspensión de la ceremonia por culpa de la huelga de guionistas. Una vez cancelada la protesta de los escritores, la industria cinematográfica estadounidense, que no podía permitirse perder también la gala de los Oscar, se volverá a citar en el Teatro Kodak de Los Ángeles para coronar a sus estrellas, entre las que este año puede sonar un nombre español.
Bardem podría recibir el premio de su propia novia, pues Penélope Cruz será, un año más, una de las encargadas de entregar uno de los galardones. Si le encargan la categoría de Mejor actor secundario, puede que se viva una situación parecida a la de hace unos años, cuando ella y Antonio Banderas le entregaron el Oscar a la Mejor película extranjera a Almodóvar por Todo sobre mi madre.