El hasta ahora alcalde de Estepona (Málaga), Antonio Barrientos, principal imputado en la operación Astapa, dejó su acta de concejal en el ayuntamiento, se dio de baja en el partido socialista y dimitió como secretario general de la agrupación en la localidad.
Barrientos, que toma el camino que el PSOE pidió también hasta ahora sin éxito para los otros cinco ediles imputados en esta operación, firmó sendos escritos de renuncia la tarde del lunes aunque fueron registrados ayer de forma oficial. En el que redactó para el Pleno expresa "de manera absolutamente libre su renuncia al acta de concejal", según explicó el abogado del ex regidor, José Carlos Aguilera, con lo que "ya queda completada desde el punto de vista jurídico esta situación", aseguró. Barrientos dimitió el lunes como alcalde.
Aguilera anunció que está preparando el recurso de apelación directamente ante la Audiencia Provincial contra el auto de prisión incondicional dictado por la jueza que instruye este caso contra la corrupción urbanística municipal, Isabel Conejo. Según el letrado, se acude directamente a la Audiencia porque no tienen "confianza en que vaya a modificar su decisión en tres días".
Al margen del ingreso en prisión, la defensa también recurrirá la decisión por la que se prolongó su detención del martes al viernes porque "nadie puede estar más de 72 horas detenido", dijo.
Aguilera detalló que la prisión incondicional es una medida que rechaza porque "no es ni justificada ni proporcionada, sobre todo teniendo en cuenta que el arraigo de Barrientos en Estepona es más que evidente, por lo que se descarta el riesgo de fuga ni de destrucción de documentos".
Barrientos está en el módulo 5 de la prisión de Alhaurín de la Torre, donde comparte celda con el que era su jefe de gabinete, José Flores. El abogado defensor aseguró que está "muy entero y físicamente mucho mejor que en dependencias policiales.
"Tiene la fortaleza de una persona que no tiene conciencia de haber hecho nada que merezca el reproche que está teniendo", manifestó Aguilera.