Siendo altas las posibilidades de que un grupo de palmeros a caballo entren a desahogarse a una misa de réquiem o a una representación de Calderón de la Barca, si las hubiere este fin de semana en cualquier punto de la ciudad, los partidarios de olvidarse de la Feria durante estos dos días que le quedan no deben perder la esperanza. Pese a que la actividad cultural y la diversidad lúdica de Sevilla entran en estado de coma llegada esta semana, algo se encuentra: echarse a la carretera no es la única opción.
Un primer ejercicio que convendría practicar a todos, en especial hoy, es el de la ciudadanía. Aproveche el sábado para visitar las tiendecillas de barrio o, en el supuesto de que la Feria haya atraído hasta su casa a alguna manada de familiares de fuera, haga de cicerone por el casco antiguo. Llévelos a la calle García de Vinuesa o a Mateos Gago, y entre cervecita y tapa, déjelos curiosear por las numerosas tiendas de recuerdos en las que comprar uno de esos delantales típicos de volantes, abanicos pintados a mano o cerámica artesanal.
Una idea bastante inteligente, si todavía no ha encontrado la chaquetita de entretiempo que andaba buscando, es aprovechar y pasarse por los centros comerciales, presumiblemente menos llenos que de costumbre. Nervión Plaza, Los Arcos, Zona Este o Plaza de Armas, entre otros, tienen un montón de zonas habilitadas para que deje correr a su tarjeta bancaria, además de tener cines (oportunidad para acudir al último estreno, Alicia en el país de las maravillas, en 3D y por unos nueve euros). Pero si anda con la calderilla contada o sencillamente no le apetece, hay planes más económicos y muy reconfortantes: una barbacoa en el campo, un diíta en la playa, caminar por los jardines de la ciudad, pasear con su perro, practicar algo de deporte (visite el Alamillo o tome un libro prestado en el Parque de María Luisa), unirse a alguna visita guiada y aprender sobre la Catedral, la Torre del Oro, el Alcázar, los museos o cualquiera de esos monumentos sevillanos que probablemente tenga un poco olvidados.
Tras una de estas aventuras artísticas, puede disfrutar de la cocina típica sevillana ahora que, con el buen tiempo, las terrazas y zonas de bares comienzan a cobrar vida. Incluso puede probar el rebujito típico de esta fecha si da un paseíto por la calle Betis (los guiris se lo quitarán de las manos). No falte al Café de la Prensa. Algunos locales como Al Alba o Metro Café del Río, abrirán sus puertas desde el mediodía hasta la madrugada, con copas y cócteles a cinco euros y cervezas a uno. Y si tiene suerte y da con algún relaciones públicas, casi le suplicará para que entre en el establecimiento tentándole con la invitación a un delicioso chupito.
Al otro costado de la ciudad, los pubs de Sevilla Este servirán como alternativa para pasar un rato agradable mientras toma un café y disfruta hasta altas horas de la noche. En la discoteca Bávara, próxima al Palacio de Congresos, por unos 5 euros (6 a partir de las 11 de la noche), puede tomarse su copita en buena compañía y sin escuchar sevillanas.
Es primavera y por tanto tiempo de excursiones. Aproveche para asistir a alguna exposición que El Correo tanto le recomienda y aventúrese a descubrir la historia pirata en la muestra Mare clausum, mare liberum. En el Archivo de Indias le espera un recorrido por los tres siglos de piratería contra el tráfico marítimo que mantenía España con sus colonias. Se exhiben más de 170 piezas: documentos originales y libros, maquetas de fortificaciones, reproducciones de navíos, y muestras del armamento utilizado. Otra sugerencia, por si le parecen pocas: Itálica (gratis de martes a domingo). La modalidad más barata y segura de viajar a Roma, con un paseo de lujo por las ruinas y unas vistas de órdago. ¿Que no? ¿Que quiere música? Pues tome música: la discoteca Abril. O la Sala Q, corazón de los conciertos. Hoy tiene uno a las 22.00 con The Very Best y El Guincho por 15 euros.
Después del ajetreo, puede relajarse en el barrio de Santa Cruz, visitando ese santuario de silencio. Si por el camino de cualquiera de estas opciones se encuentra un manojo de flamencas en plena actividad, no sea sieso: todos tienen derecho a disfrutar una semana.
De utilidad:Qué: Alternativas a la Feria de Abril.
Dónde: En cualquier barrio de Sevilla puede encontrar planes que se alejen de los farolillos.
Alternativas:
Hacer deporte: Parque de María Luisa, Infanta Elena, Alamillo. Abiertos de la mañana a la noche. Comprar recuerdos en la calle Mateos Gago o García de Vinuesa. Leer en el Parque de María Luisa o aventurarse a descubrir sus rutas. Visitas turísticas: Paseo por los monumentos sevillanos o exposiciones. Mare Clausum, Mare Liberum: Archivo de Indias. De lunes a sábado de 9.30 a 17.00. Itálica: En Santiponce. De martes a domingo de 10.00 a 14.00. Gratis. Fotografía: Voces de Iraq. En el Patio del Ayuntamiento de 10.00 a 13.00 y de 17.00 a 20.00. Exposición Becas de Artes Visuales. Sala Villasís del Centro Cultural Cajasol. De martes a sábado de 11.a 13.30 y de 18.00 a 21.00. Domingo de 11 a 13.30. Conciertos: En Sala Q, C/ Metalurgia, 25. En la web de El Correo, elcorreoweb.es, puede encontrar más sugerencias para vivir un fin de Feria diferente.
