Beatriz Reyes, una de las supervivientes del accidente de Barajas que ayudó a salvar a dos niños, ha dicho hoy que no sintió nada extraño antes del despegue del aparato hasta el momento en que "giró el ala", y después notó un "golpe fuerte".
Acompañada por el consejero de Sanidad de Madrid, Juan José Güemes, y del equipo médico del Hospital Infanta Sofía, donde hoy ha sido dada de alta, Beatriz ha sentido que ha vuelto "a nacer el 20 de agosto", día del siniestro aéreo en el que murieron 154 personas.