Los jugadores béticos celebran un gol de Pabón en Anoeta
El l Betis debe certificar el próximo domingo de manera matemática su clasificación para la próxima edición de la Europa League. Necesita dos puntos más para no depender absolutamente de nadie, aunque uno podría bastar, incluso la derrota, si tenemos en cuenta que el Rayo ya no debe ser rival porque le ha sido rechazada por segunda vez la licencia para competir en Europa y ésta parece ser ya definitiva, pues no piensan ni recurrir al TAS.
El Betis, pues, dispone 
de dos partidos para sumar dos puntos, aunque haría bien en sellar su pasaporte este mismo domingo de manera definitiva, pues dejar el remate para la última jornada reviviría viejos fantasmas de muy ingrato recuerdo por Heliópolis. Sin ir más lejos, el 19 de mayo de 2010 el Betis ganó en el último partido de Liga 4-0 al Levante pero se quedó con la miel del ascenso en los labios en un triple empate con el equipo levantino y el Hércules, que ganó 0-2 en la cancha del Real Unión de Irún y condenó a los béticos a otro año en el infierno de Segunda.
Después de eso llegó la manifestación del 15-J, el intento de venta de Lopera a Luis Oliver, el fichaje de Mel, los autos de la jueza Alaya y el ascenso en el AVE de vuelta de Tarragona tras perder con el Nástic el 15 de mayo de 2011, tres jornadas antes de que acabara la Liga.
Dos años antes, el 31 de mayo de 2009, el Betis había descendido a Segunda división en otra jornada final de infarto en la que todos los astros se confabularon en contra de los béticos, incluido el que iluminaba Heliópolis, pues los verdiblancos, entrenados por Josep María Nigués, dependían de sí mismos para eludir el descenso pero fueron incapaces de ganarle en casa en la última jornada al Valladolid, que también se jugaba la permanencia.
El Betis de Oliveira, Edu, Mark González, Emana, Sergio García, Pavone, Nelson o Juanito no pasó del empate 1-1 y dio con sus huesos en Segunda con 42 puntos por culpa de un gol en el goal-average general respecto del Getafe, que en el último partido logró el empate que le salvaba (1-1 en Santander), al igual que logró ganar el Sporting (2-1 al Recre), que llegó a la última jornada con un punto menos y la acabó con uno más y también salvado.
Así las cosas, el domingo sí o sí, el Betis debe certificar su pase a la Europa League, aunque enfrente estará un Zaragoza que se juega la permanencia y que puede irse ese mismo día a Segunda división en caso de derrota.
Las matemáticas están con el Betis, que en 19 de las 27 combinaciones posibles (un 70,37%) que se pueden dar este domingo entre su partido, el del Sevilla en Pamplona y el Getafe-Rayo, certificaría de forma matemática su presencia en Europa teniendo en cuenta que el Rayo no puede ir. Lo haría en el 100% de los casos ganando al Zaragoza, en 6 de 9 casos (66,6%) empatando siempre que no ganara el Sevilla e incluso en 4 de 9 casos (44.4%) perdiendo, para lo que no deberían ganar ni Sevilla ni Getafe.
Si el Rayo tuviera licencia, las opciones matemáticas del Betis de sellar esta jornada el pase serían solo del 29,6%: un 66,6% ganando, un 22,2% empatando (si perdía el Rayo con el Getafe y no ganaba el Sevilla), y un 0% perdiendo.
