A Antonio Tapia le encantaría disfrutar de un ataque compuesto por Oliveira y Pavone. Y si es con Sergio García detrás, mejor. La realidad, sin embargo, dice que será muy extraño que todos estén en el Betis el 30 de agosto. Oliveira podría irse al Al-Jazira, que tiene un acuerdo con el Betis, pero el delantero no quiere exiliarse al emirato de Abu Dhabi.
La operación salida en el Betis, totalmente atascada hasta ahora, puede empezar en cuestión de horas con un caso quizás inesperado, el de Ricardo Oliveira, que hace no demasiados días garantizaba su compromiso con el proyecto del ascenso a través de su agente. Su actitud no lo desmiente, porque es él quien de alguna manera está frenando la operación, pero el Betis no piensa igual y ya ha alcanzado un acuerdo con el Al-Jazira para traspasar al brasileño a este equipo de la multimillonaria e intrascendente liga de Abu Dhabi, en los Emiratos Árabes Unidos, por la nada despreciable cantidad (como dirían en cierto concurso de los años 80) de 14 millones.
En principio, Oliveira no ve claro lo de irse al mismo conjunto donde vegeta el ex bético Sobis, pero a Manuel Ruiz de Lopera sí le convencen los petroeuros. Con ellos obtendría liquidez inmediata y casi recuperaría el gasto que hizo en enero por el punta. Entonces pagó 8.977.142 euros "con comisiones incluidas en efectivo y metálico", según comunicó orgulloso el propio club en su web, y ahora cobraría 7 millones, ya que la otra mitad sería para el Zaragoza. Además, la entidad se ahorraría un sueldo altísimo (unos dos millones anuales). Y hay otra ventaja: ahora, aparte del salario, los clubes pagan el 20% de impuestos; con la inminente reforma fiscal, el porcentaje subirá a algo más del 40%. Liberarse de esas cantidades extra es otro aliciente para Lopera.
El Al-Jazira ya anunció anteayer que estaba a punto de cerrar un gran fichaje para compensar la marcha de Baiano y la baja por lesión de Sobis. Un día antes, el Betis reveló que un club árabe pujaba por el 50% del atacante. Según fuentes próximas a la negociación, los contratos ya están redactados y a la espera de que se estampen las firmas. Falta el sí de Oliveira, pero la relación de Lopera con los árabes es espléndida tras el traspaso de Sobis, que le reportó 10 millones.
EL CASO ARZU
Y mientras uno que no quiere irse puede estar a punto de marcharse, otro que quiere marcharse sigue sin irse. Se trata de Arzu. La noticia es que el Getafe ya no oculta su intención de contratar al nazareno. Lo admitió ayer el presidente, Ángel Torres: "Arzu es una de las opciones. Le queda un año de contrato en el Betis. Nos lo ofrecieron y estamos negociando a ver qué pasa", reveló.
