Varias decenas de trabajadores del servicio de prevención y extinción de incendios de Sevilla han participado hoy en un acto de protesta consistente en el reparto de piruletas como irónica crítica a las "edulcoradas" mentiras del Ayuntamiento respecto al plan de empleo de 2007, la oferta de empleo de 2007, 2008 y 2009 y la subida de mínimos en las guardias de doce efectivos diarios acordada en octubre de 2009.
El secretario general del Sindicato Profesional de Bomberos (SPB) en el Ayuntamiento hispalense, Juan Antonio Ballesta, indicó a Europa Press que, asimismo, los bomberos han procedido al reparto de panfletos con el fin de informar de su situación y de "hacia dónde se desvía el presupuesto".
"Lo que venimos demandando se lo hemos hecho llegar a la ciudadanía con un dulce, que al fin y al cabo es lo mismo que el Ayuntamiento hace con nosotros, dilatar con buenas palabras los incumplimientos hasta que se agote su candidatura, que suponemos que es lo que se está esperando", lamentó Ballesta.
Con la participación de unos 50 bomberos de los turnos salientes, al próximo acto convocado por el SPB --el próximo miércoles 9 de junio, en el Muelle de la Sal-- están convocados todos los trabajadores del servicio para hacer movilizaciones en el agua. "Queremos llamar la atención de la corporación y de la ciudadanía, haciendo ver que estamos con el agua al cuello", expuso el líder sindical.
Y es que, según el secretario general del SPB en el Consistorio hispalense, el equipo de gobierno "ya nos ha dado una respuesta que se atiene al discurso fácil, el de la mala situación económica que les imposibilita asumir un acuerdo que implique coste económico", a pesar de que, según expuso, el coste sería "cero".
"La sorpresa con la que nos hemos encontrado es que para solucionar los demás puntos había que acabar primero con el proceso del plan de empleo, que implica la reorganización del servicio y una posterior modificación de la plantilla para acabar el proceso, y una vez finalizado se podría mandar a publicar las bases de las oposiciones y convocarlas; cuando éstas estén finalizadas se podrán subir los mínimos", dijo Ballesta.
Todo ello hace que los tres asuntos se vinculen y aclara "la inexplicable tardanza en finalizar el plan de empleo, cuyos exámenes se hicieron en octubre del 2009". "Después de mucha paciencia nos hemos dado cuenta de que la única intención de Alfonso Mir era ganar tiempo y nuevamente volvernos a engañar", lamentó.
EL DETONANTE
Para los bomberos, el detonante fue cuando el pasado jueves 20 de mayo la directora general de Recursos Humanos, Eva María Contreras, "nos convocó a todos los sindicatos en una mesa de negociación y nos anunció que el plan de empleo, tal y como estaba redactado, era incumplible, puesto que el coste cero que implicaba el acuerdo no se podía detraer del concepto de productividad, y que para llevarlo a cabo hacía falta una modificación del mismo, que como muy pronto se finalizaría en la primera quincena de julio".
La otra modificación que se proponía, añadió el sindicato, era la amortización de cerca de 40 plazas de bomberos de las 86 que estaban ofertadas, aludiendo a necesidades de reorganización de la plantilla.