Local

Bosé: "¿Retirarme? los artistas se jubilan cuando la palman"

Después de más de 30 años de carrera, consagrados y cerrados con su exitosa gira Papito Tour, Miguel Bosé vuelve al mercado con las ideas más claras que nunca y dispuesto a no morderse la lengua ante nada ni nadie.

el 12 mar 2010 / 19:39 h.

TAGS:

Después de más de 30 años de carrera, consagrados y cerrados con su exitosa gira Papito Tour, Miguel Bosé vuelve al mercado con las ideas más claras que nunca y dispuesto a no morderse la lengua ante nada ni nadie. Con esta intención ha publicado esta semana Cardio (Warner), un nuevo trabajo “lleno de solaridad y buen rollo ochentero” en el que marca distancias con sus discos anteriores, como él mismo explica en una entrevista concedida a este suplemento.


“La gente ya está acostumbrada a que cuando hago algo no me repita. En Cardio se van a encontrar un sonido contemporáneo, que tiene mucho de tecnología pero que sin duda forma parte de mi estilo”, explica.


Este nuevo álbum continúa su trayectoria tras el punto y seguido que supuso Papito, un disco que cerraba una etapa de tres décadas en la música pero que en ningún momento aspiró a convertirse en una despedida. De hecho, Miguel Bosé no quiere ni oír hablar de retirada: “En la vida he dicho que me fuera a marchar. Sí que dije que Papito iba a ser el cierre de una etapa, pero jamás me he planteado irme. Creo que eso lo ha difundido alguien al que le gustaría quitarme de enmedio para vender más discos”, bromea.


No en vano, Bosé está convencido de que un artista jamás se jubila. “En el reino del arte, los creativos hasta que no la palmamos no nos retiramos. Muchísimos artistas se han muerto pintando, escribiendo, interpretando... A nosotros no nos afectan esas cosas de la jubilación a los 65 o los 67”.


Cardio, que también ha salido a la venta en América y está “obteniendo una respuesta brutal en México, Argentina o Chile”, debe el título a una palabra griega que significa corazón.


Miguel Bosé no sólo se presenta con nuevo disco bajo el brazo, sino con una renovada y esbelta imagen después de perder 20 kilos. “Ha sido por varias cosas. He estado embarcado en una gira muy larga, y eso lo nota el reloj biológico. Quería ponerme en forma y necesitaba sentirme bien conmigo mismo para este álbum”. De hecho, el disco incluye una canción dedicada a la dieta que ha seguido el artista, Ayurvédico. “Es un tema que no tiene ni pies ni cabeza, sólo buen rollo y un estribillo sin sentido”, comenta.


El cantante da por cerrada su etapa creativa con este trabajo por una larga temporada. “En este momento, el cupo de canciones está cerrado. No tengo intención de componer ningún tema más hasta el próximo disco”. Tampoco se ve capaz Bosé de escoger la perla de este trabajo. “Me quedo con las 12 canciones. Son un collar de perlas inseparables”.
Estos temas, a veces banales y a veces comprometidos, recorren varios aspectos de la personalidad de Bosé. En Júrame se recuerda la “fortaleza necesaria” que necesitaron Juanes y él para llegar a cantar el pasado 20 de septiembre en la Plaza de la Revolución de La Habana. El concierto Paz sin fronteras se mantiene así vivo en este disco. De aquello, Bosé no quiere entrar en controversias y sólo quiere destacar que “quien salió ganando fue el pueblo de Cuba”.


 Entre medias, aparece en Cardio el contagioso estribillo de su primer sencillo Estuve a punto de..., el romanticismo de ¿Hay? o el deliberado amaneramiento del tema final, Eso no.


Para este álbum ha contado con Nicolás Sorín, con el que comparte el proceso de gestación de sus trabajos desde Velvetina y a quien ha pervertido musicalmente. Sorín, hijo del cineasta Carlos Sorín y pianista “más cercano a las bandas sonoras y al jazz”, comparte con él una formación clásica, pero Bosé le ha obligado, “en contra de su voluntad”, a pasarse a la producción y a introducir “guitarras con un sonido indie muy guarro y poco perfecto”.


Por último, Bosé opina sobre la discutida crisis musical: “La industria como tal ha muerto. Ahora se abre una nueva etapa con nuevos soportes y nuevas fórmulas. Soy desastrista, pero sería un error querer que las cosas vuelvan a ser lo que eran. Hay que adaptarse”.

  • 1