Bronca en la Cámara por acusaciones de presuntos favores a los cónyuges de Díaz y Moreno

La crispación política en Andalucía a cuenta del presunto fraude de los fondos de formación ha provocado una bronca política entre el PSOE y PP.

el 30 abr 2014 / 15:40 h.

Por Fº Javier Utrero y Enrique Bermúdez SESION DE CONTROL GOBIERNO EN PARLAMENTO ANDALUCÍA La crispación política en Andalucía a cuenta del presunto fraude de los fondos de formación, investigados por la policía, ha provocado hoy una bronca política entre el PSOE y PP que terminado en acusaciones de supuestos favores a los cónyuges de los líderes de estos partidos, Susana Díaz y Juan Manuel Moreno. El escenario, la sesión de control al Ejecutivo. El primer protagonista, Mario Jiménez, portavoz socialista, que aprovechó su pregunta a la presidenta sobre economía para derivar en la acusación de que el líder del PP-A, Juan Manuel Moreno, "colocó a su compañera en el Ayuntamiento de Málaga con fondos de formación". El portavoz, que denunció una "campaña de difamación" contra la presidenta, no dudó en señalar que el "incendio" puesto en marcha por el PP con estos fondos "lo puede terminar quemando". Acto seguido, exhibió frente a los hemiciclos populares una foto de Arsenio Fernández Mesa, director general de la Guardia Civil, junto al líder popular Juan Manuel Moreno para afirmar, a continuación: "La cúpula de Interior (por el Ministerio) estaba en Málaga el mismo día en que Moreno estaba preparando la rueda de prensa del infundio sobre los fondos". La aseveración elevó la temperatura, los comentarios y el ruido en las bancadas popular y socialistas que Jiménez aumentó al dirigirse al PP y aseverar que "van a escuchar, entre otros sitios en el Congreso, muchas cosas en las próximas semanas", como "la implicación de la cúpula de Interior en la filtración de los fondos". "Van a tener que explicar más de 50 millones que ayuntamientos del PP han administrado de los fondos de formación y si forman parte de la corrupción de los 2.000 millones que han denunciado", ha recalcado. La crispación aumentó cuando, entre gritos y comentarios de uno y otro grupo, el presidente de la Cámara, Manuel Gracia (PSOE), llamó la atención al diputado del PP, Antonio Sanz. "Señor Sanz guarde silencio. Viene poco pero cuando viene se le nota", exclamó Manuel Gracia. Las protestas aumentaron en el hemiciclo popular, lo que hizo que Gracia pidiera excusas por sus palabras. El portavoz socialista retomó la intervención para sostener que "el tal Moreno tendrá explicar públicamente por qué un concejal del PP del Ayuntamiento de Málaga reconoció públicamente que un diputado de Cantabria colocó a su novia en este consistorio con fondos de formación". Con los murmullos y el ruido in crescendo, Mario Jiménez concluyó, entre aplausos: "El diputado cántabro era Moreno Bonilla y colocó a su compañera con esos fondos". Lejos de sosegarse el tenso debate, en la pregunta que el portavoz popular, Carlos Rojas, ha dirigido a la presidenta sobre la estabilidad del Gobierno, los reproches sobre el uso de los fondos de formación han sido mutuos. Rojas no profundizó en su denuncia, pero lanzó una pregunta: "¿Por qué el PSOE tenía dirigentes y familiares colocados en la FAFFE (Fundación Andaluza Fondos de Formación y Empleo) y organismos similares anexos a los sindicatos?". Fue en su segunda intervención cuando el portavoz popular no dudó en detallar esa denuncia: "Con nombres y apellidos. ¿A qué favor responde que su marido trabajara en la formación de Andalucía pagada con dinero público de la Junta?". "El señor Moriche (marido de Díaz) está en nómina", ha asegurado Rojas, documento en mano y entre aplausos del PP, antes de reclamar a la presidenta que dé explicaciones en el Parlamento. La presidenta no aludió en concreto a ese asunto pero lanzó una invitación a los populares: Que se dirijan a los juzgados si tienen "papeles con fundamento" sobre el presunto fraude en formación.

  • 1