El primer ministro británico, Gordon Brown, ejecutó ayer una importante remodelación de su Gabinete para hacer frente a la crisis económica en la que destaca el inesperado regreso de Peter Mandelson al Gobierno. El hasta ahora comisario europeo de Comercio, quien ya fue ministro en dos ocasiones con Tony Blair y en ambas se vio forzado a dimitir por escándalos, pasa a ocupar la cartera de Negocios y Empresas.
El retorno de Mandelson, gran aliado de Blair, es la "decisión correcta" en aras del "interés nacional", dada su "experiencia incomparable" de la que puede "beneficiarse el Gobierno", aseguró ayer Brown.
"Se necesita gente seria para momentos serios", añadió, tras reconocer que para adoptar esta decisión ambos habían "dejado de lado" diferencias pasadas. Y Mandelson, "sorprendido", pero "orgulloso" por el nombramiento, admitió hoy que ha tenido "sus altibajos" con Brown.
La tensa relación se remonta a 1994, cuando Mandelson decidió apoyar a Blair -y no al actual jefe del Gobierno- como líder del Partido Laborista.
Flanqueado por el ministro de Economía, Alistair Darling, Brown anunció además la creación de un Consejo Económico Nacional que se reunirá por primera vez el próximo lunes. Con todo pretende revitalizar al Ejecutivo de cara a las próximas elecciones legislativas de 2010 y afianzar el reciente repunte de los laboristas en los sondeos, en los que los conservadores les aventajan considerablemente.
