Equipos de rescate siguen buscando hoy en las aguas del Nilo a más de treinta personas que están desaparecidas desde ayer al colisionar dos transbordadores por la imprudencia de uno de los pilotos, según fuentes oficiales.
La tragedia se desató anoche frente a la población de Rashid, también conocida como Rosetta porque allí se encontró en 1799 la famosa piedra con inscripciones en jeroglífico, demótico y griego, y que permitió descubrir el significado de los antiguos ideogramas egipcios.
Mientras la información oficial es muy imprecisa, los testimonios recogidos han permitido reconstruir el accidente, que se registró a unos 30 metros del puerto de Rashid y que afectó a una barcaza repleta de pasajeros y a otra casi vacía.
Al parecer, esta última, según se acercaba al puerto, embistió a gran velocidad a un transbordador que zarpaba de Rashid con medio centenar de personas a bordo, y que por el golpe que recibió quedó partido en dos, para hundirse rápidamente.
Este tipo de barcas, de unos ocho metros de eslora, sirven para transportar a los aldeanos de las localidades situadas en las márgenes del Nilo.
La mayoría de estas embarcaciones carecen de las autorizaciones necesarias y con frecuencia llevan sobrecarga de pasajeros.
"Los pilotos son casi muchachos y la mayoría de las veces no tienen licencia. Quizás por eso huyeron del lugar y embarcaron a un tercer bote cuando ocurrió la colisión", dijo uno de los testigos, Mohamed Shalaby, a la edición digital del diario "Al Masry Al Yum".
El ministro de Desarrollo Local, Mohamded al Mahgup, aseguró hoy que en el accidente hubo 6 heridos, 7 personas fueron rescatadas de las aguas y otras 6 regresaron a sus casas tras llegar a la orilla por sus propios medios.
Pero Al Mahgup, en declaraciones a los periodistas, insistió en que a media tarde de hoy no se había rescatado ningún cadáver ni se había denunciado ante la policía la ausencia de algún pariente o vecino.
Según estas cuentas, y asumiendo que por lo menos en uno de los transbordadores viajaban unas 50 personas, según los testigos, se cree que están desaparecidas más de treinta personas, una cifra más baja que los 50 ó 60 que se calculaba ayer.
Estas cifras facilitadas por el ministro difieren de otro saldo provisional de víctimas dado anoche a Efe por fuentes de los servicios de seguridad y también por la televisión pública, que aseguraban que había al menos diez fallecidos.
Esa cifra de muertos, sin embargo, no ha tenido hoy confirmación de las autoridades de la zona ni existe constancia de dónde puedan estar depositados los cadáveres, de existir.
El gobernador de la provincia de Bahira, Mohamad Shaarawi, declaró a los periodistas que los hombres rana seguían peinando hoy la zona, pero se seguía sin encontrar más cuerpos, lo que contradice las versiones anteriores que hablaban de diez muertos.
De momento, según la agencia oficial MENA, ya han quedado detenidos los propietarios y los dos pilotos de las embarcaciones involucradas en el accidente, que guardarán prisión provisional durante cuatro días mientras se intentan establecer responsabilidades.
Los testimonios recogidos indican que la mayoría de las personas desaparecidas eran mujeres y niños. Ese punto del Nilo, en uno de los dos brazos más importantes del delta, el occidental, está muy próximo a la desembocadura, y las corrientes hacia el Mediterráneo son muy fuertes.
Las aguas del Nilo y las costas egipcias del mar Rojo son escenarios frecuentes de naufragios por la imprudencia de sus responsables o la malas condiciones en las que se encuentran las naves.
El pasado 19 de noviembre, un barco cargado con un grupo de submarinistas españoles se hundió frente a la ciudad turística de Sharm el Sheij, en aguas del mar Rojo, y en el percance perecieron dos españoles de 33 años.
La peor tragedia en la historia reciente del país se registró el 3 de febrero del 2006, también en el mar Rojo, cuando se declaró un incendio en el ferry "Salam 98", que cubría la ruta entre la ciudad saudí de Duba y la egipcia de Safaga, con un saldo de 1.033 muertos.
