Local

Bush aprovecha su visita para avisar a Irán de que contestará a sus agresiones

La visita de Bush a Israel coincidió en el tiempo con uno de los momentos más tensos en la relación entre EEUU e Irán. El líder estadounidense dijo que existe una "oportunidad para la paz" en Oriente Próximo, al tiempo que advirtió de que responderá a los hostigamientos contra su país.

el 14 sep 2009 / 22:28 h.

TAGS:

La visita de Bush a Israel coincidió en el tiempo con uno de los momentos más tensos en la relación entre EEUU e Irán. El líder estadounidense dijo que existe una "oportunidad para la paz" en Oriente Próximo, al tiempo que advirtió de que responderá a los hostigamientos contra su país.

El líder norteamericano, George W. Bush, bajó en solitario del Air Force One, el avión presidencial, ya que su esposa, Laura, se quedó en Washington. Fue recibido por el primer ministro de Israel, Ehud Olmert, y el presidente del país, Simón Peres. Son hombres a los que conoce bien y que le dieron la bienvenida con sonrisas y satisfacción en el único país en Oriente Próximo donde Bush tiene buena prensa.

Rodeado de mandos militares israelíes y una guardia de honor, el presidente dio la mano a una larga fila de parlamentarios, diplomáticos y líderes eclesiales de las diferentes religiones que comparten la custodia de los lugares santos, que Bush visitó como gobernador de Texas en 1998.

La Casa Blanca ha concebido el viaje a Israel y Cisjordania, donde Bush pasará tres días, como una manera de dar un impulso a las negociaciones de paz relanzadas en la conferencia de Annapolis en noviembre pasado y que deberían culminar a fin de año con un acuerdo. "Vemos una nueva oportunidad para la paz en Tierra Santa", dijo.

No obstante, el tema de Irán saltó al frente de la agenda después de que barcos de la república islámica hostigaran el domingo pasado a tres buques estadounidenses en el Estrecho de Ormuz, en el Golfo Pérsico.

una amenaza. En estas circunstancias, Bush no pudo evitar hacer referencia a la crisis con Teherán y reiteró que Irán "es una amenaza para el mundo" y alertó de que puede retomar "fácilmente" su programa nuclear y fabricar bombas atómicas. En este sentido, el líder estadounidense remarcó que considerará "todas las opciones" para responder a cualquier otro hostigamiento contra las fuerzas de su país. "Habrá consecuencias serias si ataca nuestros barcos. Les aconsejo que no lo hagan", advirtió.

El presidente israelí tampoco esperó demasiado para entrar de lleno en la polémica. Ya en la ceremonia de llegada de Bush, Peres dejó clara la importancia del problema con irán para Israel, cuya destrucción ha pedido el presidente Mahmud Ahmadineyad. Simón Peres habló de Irán incluso antes de referirse a las negociaciones de paz con los palestinos.

"Aceptamos -le dijo a Bush- su recomendación de no subestimar la amenaza de Irán. Irán no debería subestimar nuestra determinación de defendernos", dijo.

Bush, en cambio, usó términos más vagos, al destacar que a Estados Unidos e Israel les une una "fuerte alianza", la cual "garantiza la seguridad de Israel como un Estado judío". Pese a su buena relación, el norteamericano se atrevió a instar a Olmert a desmantelar los asentamientos construidos en Cisjordania sin autorización del Gobierno. "Sí, deben irse", afirmó. El consejo surtió efecto, pues Olmert señaló que "respetará" sus compromisos, aunque exigió a los palestinos que respeten también los suyos para "poner fin al terrorismo".

  • 1