La gaviota se ha convertido en el litoral gaditano en el principal enemigo público. Se le acusa de provocar el exilio de otras especies, de dañar a la vegetación y, sobre todo, de causar graves molestias a los ciudadanos. Con este argumento justifica la Delegación de Medio Ambiente la destrucción de casi 15.000 huevos en toda la provincia.
Esta actuación forma parte de un plan con el que se quiere frenar el aumento de población de esta especie, que se localiza principalmente en el Campo de Gibraltar y en el Parque Natural de la Bahía de Cádiz, donde en 2005 se censaron a 4.124 parejas reproductoras.
"Tuvimos reuniones con los ayuntamientos donde narraban situaciones verdaderamente molestas. En los cascos urbanos se están originando varios problemas. Se dan algunas situaciones complicadas en mercados de abasto donde se ponen agresivas a la hora de buscar comida y en patios de colegio", señaló la delegada de Medio Ambiente, Gemma Araujo, quien aseguró que han adoptado esta medida en "auxilio" de los municipios.
En la costa gaditana, actualmente, la gaviota patiamarrilla es la especie con un mayor número de ejemplares. Así se recogió en un estudio realizado por la Consejería de Medio Ambiente para evaluar el impacto de esta ave que ha proliferado en exceso hasta triplicar su población debido a su naturaleza "adaptable, oportunista y gregaria" que le permite vivir en los hábitats modificados por el hombre.
Las ciudades y sus edificios históricos están siendo utilizados como lugares de cría y dormideros mientras que los vertederos se convierten en el escenario perfecto para alimentarse. Esta explosión demográfica ha desencadenado en una nueva situación biológica con consecuencias muy negativas como la depredación directa sobre varias aves (la cigüeñela, la avoceta y los charranes), el desplazamiento de otras especies de sus lugares de nidificación, la contaminación del agua o diversos efectos nocivos.
Son razones suficientes para que Medio Ambiente haya iniciado esta batalla contra la gaviota que no sólo consiste en descastar sus huevos, sino también en eliminar a disparos a ejemplares adultos en los vertederos y en el desmantelamiento de crías en sus principales colonias.
