No está la situación para tirar cohetes, pero al menos las expectativas son mejores que el pasado otoño. El 94% de las empresas andaluzas percibió que la economía de la región se deterioró hasta junio, aunque sólo el 32% cree que irá a peor en un año, esto es, el 53% menos de las que se pronunciaban así en noviembre.
"Hay un estancamiento de las empresas que consideran que el conjunto de la economía va a peor, aunque para el futuro sí hay esperanzas". Así lo confirmó ayer el director de la Escuela Andaluza de Economía de la patronal CEA, Manuel Ángel Martín, durante la presentación del IV Barómetro de la Percepción de la Economía Andaluza elaborado por la consultora IMC. Esto se debe, en su opinión, a "la campaña generalizada de optimismo, a que aparecen datos reales más positivos y a que las medidas están comenzando a dar resultado".
Del informe, que estudia la percepción que de la economía regional tienen tanto la población en general como el tejido productivo en particular, apunta a que las empresas son más pesimistas que los particulares a la hora de dictar una sentencia al respecto. Y es que la visión de la evolución de la coyuntura andaluza en el último año depende los ojos con los que se mire.
Así, mientras que la población general asegura en casi el 80% que la situación se deterioró, este porcentaje se eleva en el caso de las empresas, hasta superar el 94%. Martín explicó en este sentido que estas últimas cuentan con una visión "mas adelantada" del futuro económico y valoró "razonable" que sus perspectivas sean "más cautelosas".
En cualquier caso, los dos colectivos entrevistados opinan que el contexto andaluz irá a mejor en el próximo año. De hecho, mientras que el pasado noviembre el 71% de la población y el 68,7% de las empresas preveían un horizonte todavía más negro, en junio sólo lo veían así el 36,9% y el 31,8%, respectivamente.
Paradójicamente, la valoración que hacen los encuestados -800 establecimientos ubicados en la región y 800 residentes- sobre su entorno más próximo, es decir, empresas propias y hogares, es mejor que la general. De hecho, sólo el 30% de la población hace una valoración negativa, así como el 42% de las firmas.
Estas últimas, en cuanto al futuro, prevén, en su mayoría, que se reduzcan los impagos (47,5%), que su productividad se mantenga (53,3%) y que la conflictividad laboral siga igual (63%). En lo referido a los contratos, la percepción es que los fijos se mantendrán (57%) y que los eventuales se reducirán (43%).
El barómetro insta además a los encuestados a dar su opinión sobre los aspectos concretos de la economía de la comunidad. La evolución muestra que, sobre cuestiones como los salarios o impuestos, sus valoraciones no han cambiado, así como sobre el precio de préstamos e hipotecas, y subió en el caso del coste de los productos de consumo cotidiano. Eso sí, bajó en lo demás, esto es, sobre aspectos como la creación de empresas, de empleo, las exportaciones o las infraestructuras públicas.
administraciones. Son múltiples las medidas puestas en marcha en los últimos meses por las administraciones y también los entes privados para combatir la crisis. Los empresarios dan la mejor nota a su propia gestión, a la que le sigue la llevada a cabo por el Gobierno Obama. Sin embargo, tienen peor imagen de los organismos públicos más cercanos, como la Junta o los distintos ayuntamientos. Esto es justo lo contrario de lo que percibe la población en general, que da las mejores notas a este respecto a las administraciones más próximas.
