Un nuevo comando de ETA ha sido desarticulado. Esta vez en Navarra. Las cuatro personas que fueron detenidas ayer por la Policía Nacional estaban preparadas para matar a tenor de lo incautado: 100 kilos de explosivos, armas y otros materiales para preparar atentados, además de diversa documentación.
La operación se desarrolló a partir de las tres de la madrugada de ayer y en la misma fueron registrados siete pisos y locales en diversos puntos de Pamplona y en la localidad cercana de Añorbe. Los agentes se incautaron de 79 kilos de nitrato amónico, 15 de polvo de aluminio, uno de pentrita, 5 litros de reforzador líquido, dos revólveres y cartuchos del calibre 38, cordón detonante, temporizadores, un radio control, un bidón zulo y varias fiambreras, además de abundante material informático, que guardaban en un trastero del municipio de Asoain, cercano a Pamplona.
De hecho, miembros del aparato militar de ETA cruzaron hace tres semanas la frontera para entregar, en suelo español, los explosivos, informaron a Europa Press fuentes de la investigación.
Los detenidos en esta nueva operación policial son cuatro jóvenes de entre 26 y 29 años, tres de ellos no fichados. El otro arrestado, en Pamplona, es Aurken Sola Campillo, condenado por colaboración con ETA, en concreto con el comando Urbasa, relacionado con el asesinato del concejal de UPN en Leitza José Javier Múgica. También fue apresado en la capital navarra Xabier Rey Urmeneta, mientras que en Valencia era arrestada su compañera Araitz Amatria, y en la localidad navarra de Añorbe Sergio Boada Ezpoz. Del arresto de Amatria, el delegado del Gobierno en la Generalitat Valenciana precisó que la joven se había desplazado a Valencia "hace unos días, seguramente porque temía que se pudieran producir las detenciones, y buscaba refugio en esta ciudad entre personas de su ámbito familiar", a lo que añadió que no se le han hallado armas pero sí material informático.
Se da la circunstancia de que los cuatro detenidos, vivían cada uno en sus respectivos domicilios y en algunos casos estudiaban o trabajaban, es decir, hacían una vida normal, sin levantar sospechas entre sus vecinos, según Europa Press.
Otro logro. El ministro de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, informó de que los cuatro conformaban un comando de ETA "preparado para atentar". "Cuando un comando tiene armas y explosivos, imagínese, lo normal es que estuvieran preparando algo", comentó el ministro, quien dijo que, "en principio", esa acción sería en Navarra. Según Rubalcaba, ésta es una operación preventiva y subrayó que "es mucho mejor prevenir que curar" en política antiterrorista.
Una idea compartida por el líder del PP, Mariano Rajoy, para quien éste "es el camino para acabar con el terrorismo", es decir "las Fuerzas de Seguridad del Estado, la ley y el apoyo de todos los ciudadanos", por lo que confió en que el Gobierno mantenga la "rectificación en materia de política antiterrorista".
Todas las instituciones y partidos felicitaron ayer a las Fuerzas de Seguridad del Estado por la operación, que ha evitado una tragedia.
