La Guardia Civil detuvo ayer en Barcelona a 15 personas presuntamente vinculadas con el terrorismo islamista que tenían material para fabricar explosivos. Los arrestados, entre los que había 12 pakistaníes, estaban preparados para atentar en la Ciudad Condal, según informó el ministro de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba.
Los arrestos se produjeron en el marco de una operación en la que también se registraron cinco domicilios en el barrio del Raval. Allí se encontró diverso material que puede formar parte de explosivos o puede ser utilizado para fabricar explosivos, como cuatro temporizadores.
Así lo confirmó en rueda de prensa el ministro de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, quien explicó que los detenidos estarían planteándose adquirir nuevos medios para fabricar explosivos y por tanto, "eventualmente realizar atentados violentos".
Las fuerzas de seguridad han podido acreditar que este grupo estaba "un paso más allá de la radicalización ideológica", que mostraban otros detenidos en otras operaciones policiales desarrolladas en los últimos años, que tenían que ver más con la financiación y la captación de personas. Los presuntos terroristas islamistas, que mantenían reuniones en algunos lugares no precisados y de quienes se desconoce si tenían contactos con grupos radicales islamistas, estaban "aprovisionándose de material susceptible de formar parte de explosivos" y "estaban ya en la fase de actividad", según Rubalcaba. "Cuando alguien tiene en su casa temporizadores, no hay más remedio que pensar que está planteándose acciones de tipo violento", subrayó el ministro, quien no obstante recalcó que por el momento no hay datos que permitan concluir que los arrestados planeaban un atentado inminente.
El viaje a Barcelona realizado por un individuo considerado por los Servicios de Inteligencia europeos como relevante entre los círculos radicales de paquistaníes asentados en Europa desató las alarmas y provocó el desarrollo de la operación. Esta misma semana, los servicios secretos franceses alertaron al CNI de la presencia en España de este individuo.
El hallazgo más relevante encontrado en los registros fue una pequeña bolsa con menos de 50 gramos de peróxido de acetona o TATP, un material explosivo que, a pesar de realizarse a partir de otras sustancias fácilmente adquiribles, puede ser una potente arma destructiva.
Los terroristas del 7-J en Londres utilizaron esta sustancia, así como Richard Reid, conocido como el terrorista del zapato porque en esa prenda escondía una bomba con 100 gramos de TATP.
En guardia. Según anunciaba ayer El País.com, citando a fuentes de los servicios secretos españoles, el CNI alertó a Francia, Reino Unido y Portugal de que células itinerantes compuestas principalmente por ciudadanos paquistaníes estaban en disposición de cometer atentados de forma inminente. Esta operación coincide con la visita que el presidente de Pakistán, Pervez Musharraf, tiene previsto iniciar en los próximos días a Francia, Reino Unido y Suiza.
